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Centrifugación de Metales |
| Por Sam Brown |
| SI PARA INICIARSE en este tipo de trabajo emplea
usted aluminio blando y trabaja el material sobre una forma sencilla, le
será posible centrifugar un tazón en menos de cinco minutos,
una vez que la labor ha sido dispuesta en el torno. El aluminio es fácil
de centrifugar y no muestra tendencia a agrietarse o torcerse bajo la tensión
de las herramientas formadoras. Además, no requiere destemplarse
durante los métodos de centrifugación ordinarios, pues permite
dobleces de radio mediano. Este tipo de metal se estira para formar conicidades
sin agrietarse, y no ofrece resistencia indebida a la formación de
ensanchamientos, rebordes y dobladillos. El peltre posee características
similares, pero es algo más costoso. Para trabajos comunes y corrientes,
el peltre es el metal más fácil de centrifugar. El cobre y
el latón poseen una resistencia mucho mayor ala centrifugación
y requieren destemples frecuentes. |
| Clic en cada imagen para ver más
grande y claro |
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| Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 15 - Agosto
1954 - Número 2 |
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