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Noticias de Detroit - Por Jim Dunne - Septiembre 1966
Nivelador para las curvas
       ¿Crear su propio declive a alta velocidad en una curva plana? Es posible que su coche pueda hacer esto algún día. El Dr. Yao T. Li, profesor de aeronáutica del Instituto Tecnológico de Massachusetts, ha desarrollado un sistema de suspensión que teóricamente produce el mismo efecto en un coche que una pista de inclinación aguda. El sistema del Dr. Li hace que la carrocería se incline hacia la curva y no en dirección opuesta a ella. La clave del sistema radica en la fuerza que hace que un coche patine. Esta fuerza de "escape" es captada por una "caja negra" y transmitida a un dispositivo de control que mecánicamente hace que el coche se incline en dirección opuesta. El auto se nivela automáticamente al salir de una curva. Dice Li que, como su sistema contrarresta la tendencia de un coche a volcarse cuando efectúa un viraje, es posible diseñar suspensiones más suaves para una marcha más cómoda. Además, declara él que el aumento en la estabilidad vertical permitirá diseñar carrocerías más angostas, reduciendo así su volumen para solucionar ciertos problemas aerodinámicos (una carrocería ancha y plana tiende a reaccionar como el ala de un avión a altas velocidades). A pesar de que las ideas de Li han sido corroboradas en un vehículo experimental, todavía no se han sometido a prueba en un auto de carreras. Si da tan buenos resultados en un coche de carreras, entonces el nuevo sistema permitirá desarrollar velocidades más altas y ofrecerá grandes ventajas en lo que respecta al manejo de estos vehículos.

Seguridad dentro del coche
       En su sensacional libro "Unsafe At Any Speed ("Peligro a Cualquier Velocidad"), el abogado Ralph Nader critica a la industria del automovilismo de los Estados Unidos por no tomar las medidas necesarias para proporcionar mayor seguridad a los vehículos que produce. Dice él que el 75% de todas las lesiones sufridas en accidentes de automóviles son causadas por el diseño ineficiente de los vehículos. Pero son pocos los que se dan cuenta de que Nader se refiere a las causas de lesiones y no a las causas de accidentes. Hace él hincapié en la necesidad de reducir la severidad de las llamadas "colisiones secundarias"-las que ocurren cuando los pasajeros se golpean contra el interior de un automóvil en el instante después del impacto inicial. Los expertos en seguridad manifiestan que las lesiones permanentes o la muerte constituyen consecuencias demasiado nefastas para un período tan corto de peligro; quieren que se construyan coches que protejan a los pasajeros cuando ocurre un accidente, sea cual sea la razón de éste. Así pues, dada la sensibilidad de Detroit a todas las críticas que se expresan contra sus productos, no hay duda de que los fabricantes prestarán mucha mayor atención al diseño de coches cuyos interiores constituyan verdaderas "cápsulas de supervivencia", en vez de dedicarse a alterar el diseño de cosas tales como los frenos, las luces, los neumáticos, etc. La Compañía Ford está desarrollando extremos delanteros y bastidores de chasis de tipo "corrugable" para amortiguar los impactos delanteros como otra contribución a la seguridad de sus autos de pasajeros. El objetivo de la Ford es reducir la fuerza de un impacto delantero a 50 kph a apenas la fuerza de un choque a una velocidad de 10 kilómetros por hora, por ejemplo. Se le está prestando atención especial a la parte delantera del bastidor del chasis. Las extensiones del bastidor por delante de las monturas del motor se debilitarán utilizando piezas más pequeñas y empleando una abundancia de agujeros de "reducción de peso", como las del queso suizo. Las carrocerías de los vehículos tendrán más secciones de tipo de "caja" para aumentar su efecto de "acojinamiento" durante deceleraciones súbitas. Pero no espere usted nada de esto antes del año 1968; los cambios de producción semejantes tardan tiempo en llevarse a la práctica.

Eliminación de los salientes
       Por motivos de seguridad también se está considerando el uso de tableros de instrumentos inclinados hacia atrás. El objetivo que se persigue es apartar todas las proyecciones de los pasajeros del asiento delantero y del conductor. La mejor manera de lograr esto, según los ingenieros, es moviendo todo el tablero hacia adelante tal como se hizo en el Toronado y el Riviera. Los expertos manifiestan que esto será adoptado por toda la industria dentro de los próximos dos años. Pero hay ciertos problemas que solucionar. Los conductos del calentador, por ejemplo, así como los limpiaparabrisas, las conexiones del acondicionador de aire, los aparatos de radio, las unidades de cintas estereofónicas y los compartimientos de guantes deberán cambiarse para adaptarse al espacio más angosto entre el nuevo tablero y la pared ignífera. Habrá que hacer esto o trasladarlos al interior del compartimiento del motor. Es ésta una de las razones por las cuales la General Motors y la Ford están experimentando con un tablero de tipo abisagrado, ya que no hay espacio suficiente para instalar todos los instrumentos y las conexiones. Pese a todas estas precauciones, sin embargo, son muchos los observadores y comentaristas que llegan a la conclusión de que el nervio central del problema de los accidentes está en la parte humana del automóvil más que en su construcción mecánica o en su estructura. La parte "humana" del automóvil es, por supuesto, la persona que conduce. Lo más que puede hacerse es crear las condiciones para que las consecuencias de los accidentes se reduzcan aun mínimo. Evitar el accidente mismo dependerá siempre de la capacidad, prudencia y sobridad del individuo. Y esto es algo que escapa a la perfección de la máquina.

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 39 - Septiembre 1966 - Número 3


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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus