|
Estás leyendo parte de la revista de Septiembre de 1965
|
Recomienda este artículo a un amigo
|
|
|
Casi Pierde el Rambler
la Carrera Mobil . . . en Detroit
Más Sobre Coches Con Mando Delantero y el mustang |
Como el
Rambler tiene la fama de ser un coche especialmente diseñado
para personas mayores, la American Motors consideró seriamente ordenar
al corredor que guió ese coche durante la Carrera Mobil que perdiera
a propósito. "Que gane el Falcon," pensaron los funcionarios
de dicha compañía. "No queremos que el público
siga creyendo que el Rambler es un coche que no tiene nada de divertido."
Pero al fin y al cabo decidieron ganar y permitir que el Marlin cambiara
esta errónea idea. Parece que está dando resultados.
He aquí una indicación
de la importancia que los fabricantes de autos británicos
conceden al mercado de los Estados Unidos: El nuevo TR4A, además
de contar con una suspensión trasera independiente, tiene un dispositivo
de tipo norteamericano que hace pasar los vapores de la caja del cigüeñal
al múltiple de admisión para reducir la contaminación
del aire aun mínimo.
Mientras tanto, la Ford está
dejando de instalar su sistema de ventilación efectiva de la caja
del cigüeñal en todos sus vehículos, excepto los que
se remiten a California. La válvula de este sistema se atasca cuando
no se le presta la atención debida, y pocos son los automovilistas
que siguen los consejos que se dan en relación con el servicio que
se le debe prestar a esta válvula.
Se está llevando
a cabo un intenso programa para solucionar los problemas de la
contaminación del aire. La Chrysler, al igual que otras compañías,
ofrecerá motores con modificaciones que reducirán aun mínimo
la contaminación del aire. Esto obedece al interés de los
políticos en cuestiones relacionadas con el automovilismo, cosa que
también dará lugar a la aparición de frenos de mayor
eficiencia y otras mejoras relacionadas con la seguridad en los modelos
de 1966. Las leyes que se están adoptando en este sentido han obligado
a los fabricantes a adoptar todas estas medidas.
Los Falcon de mando delantero de la Ford Motor Company (se están
probando tres modelos) distan mucho de estar listos. En Detroit se duda
mucho de que pueda instalarse el sistema de mando delantero en un coche
de bajo costo como el Falcon. El uso de un número menor de piezas
se traduce en un ahorro de manufactura, pero los costos del servicio y mantenimiento
aumentan cuando hay que extraer el motor y el extremo delantero para realizar
muchos trabajos. Se cree que los compradores de coches de bajo costo no
desean una unidad cuyo mantenimiento les ha de acarrear grandes gastos.
(El próximo mes podremos decirle más acerca de las pruebas
del mando delantero Ford.)
El diseño de un coche con mando delantero de funcionamiento
eficiente puede considerarse casi como un triunfo, debido a que la distancia
entre ejes es tan crítica. En los modelos franceses Citroen ID y
DS, lo primero que se diseñó fue el extremo delantero. Luego
se desplazaron las ruedas traseras hacia delante y hacia atrás hasta
obtener un buen manejo de los vehículos, dando esto como resultado
un estilo algo extraño.
En los círculos de ingeniería se considera que será
difícil efectuar virajes en el modelo con mando delantero que la
Oldsmobile presentará para competir con el Thunderbird. Si vira usted
a una alta velocidad, el volante se resiste a enderezarse. Y si decide usted
decelerar antes de completar un viraje, el volante tiende a moverse excesivamente
en dirección de la curva.
La Oldsmobile combina una transmisión automática
con su sistema de mando delantero a fin de reducir a un mínimo el
enfrenamiento del motor para que este efecto no sea tan grande. El uso de
neumáticos radiales también contribuirá a reducir este
problema a un mínimo.
El coche con mando delantero será objeto de toda la atención
de parte de la Oldsmobile, y los publicistas se encuentran ahora familiarizándose
con conceptos de ingeniería a fin de poder contestar todas las preguntas
que hará el público con respecto al nuevo sistema. En los
otros modelos Oldsmobile sólo se cambiará el estilo de la
carrocería y las guarniciones. Es poco probable que en 1966 aparezca
el motor Oldsmobile de aluminio de que tanto se ha hablado.
Manténgase también al
tanto de nuestro artículo sobre el motor V6 de la Chrysler, la nueva
carrocería del Imperial y el Dodge con nombre nuevo. (Lleva el mismo
nombre que el Charger, un auto de exhibición de la Dodge, pero este
modelo sólo ofrece una característica diferente: luces de
cola a todo lo ancho.)
La Mercury también ha estado
exhibiendo su modelo Cougar y usará este nombre para un coche de
tipo Mustang, pero con estilo propio. Nada se sabe oficialmente todavía,
claro está, pero todo indica que habrá grandes sorpresas en
1966.
Es posible que el gran aguacero que
cayó durante la Carrera de Sebring de este año tuvo a la larga
buenas consecuencias. El conductor de un Cobra dijo lo siguiente a Ken Miles.
"El agua me llegaba hasta la cintura. Quería que me obligaran
a detenerme para poder mostrar esto al público." El ganador
Hap Sharp manifestó a este columnista que manejó su coche
con el agua llegándole a las axilas. Su compañero, Jim Hall,
cree que el peso de 132 kilos del agua contribuyó a que los enormes
neumáticos de tipo de Indianápolis se mantuvieran en contacto
con la pista en vez de flotar.
Singular Modelo Oldsmobile
de Lujo. Algunos voceros que dicen haber visto el nuevo Oldsmobile
en réplica al Buick Riviera, consideran un triunfo el nuevo estilo
de la GM al no tener semejanza alguna con el Buick. La nueva línea
del Oldsmobile para el año 66 será un triunfo.
La competencia dispone de mayor tiempo para imitar el Mustang.
El anuncio hecho por la Ford de que el modelo Mustang no cambiará
su estilo por lo menos en un año, quizás dos, impulsó
las ventas, pues había quienes esperaban un cambio en la carrocería
de los modelos nuevos. El anuncio también ha ayudado a los competidores
de la Ford que no sabían de cuanto tiempo disponían para diseñar
sus productos antes de que se operaran cambios en el modelo original Mustang. |
Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 37 - Septiembre
1965 - Número 3 |
|
|