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Noticias de Detroit - Febrero 1961 - Por Jim Whipple
 
¿Cuál será el fallo del público? Los nuevos compactos de la Buick, la Oldsmobile y la Pontiac ya se hallan en las salas de exhibición. Las decisiones de la GM constituyen una realidad y ahora solamente queda esperar las reacciones del público. En este momento es todavía una interrogante si los autos compactos o los grandes serán favorecidos, y aún más incierto qué autos en particular.

       Lo único seguro es que los concesionarios del Buick, del Oldsmobile y del Pontiac se han beneficiado con las experiencias, el año pasado, de los vendedores del Chevrolet. Las salas de exhibición de éstos se hallaban atiborradas de Corvairs 700 provistos de toda clase de accesorios. Sus marbetes de precios incluían radios, calentadores, transmisiones automáticas y otros accesorios que la división Chevrolet fue capaz de añadir.

       Cuando los discretos compradores de compactos acudieron esperanzados en adquirir un auto nuevo por el valor de uno usado, y se enteraron de los precios, sufrieron una amarga sorpresa, y se retiraron desconsolados.

       Parece que ahora los concesionarios del Buick, del Oldsmobile y del Pontiac no han cometido el mismo error. En cada sala hay un F-85, un Tempest, o un Special en modelo standard de precio mínimo, con cambio manual, y únicamente un calentador. En las series Oldsmobile y Buick, dicho modelo no llega a 2.500 dólares sin incluir los impuestos. El Tempest de la Pontiac tiene un precio de algo más de 2.200 dólares, con calentador.

       Según los primeros informes sobre la venta de los nuevos compactos, parece que están sirviendo de reclamo, pues acude mucho público a verlos. En muchos casos, los visitantes terminan por adquirir un auto grande, inducidos por la habilidad del vendedor.

       Esto es lo que sucedió en las salas del Chevrolet durante las ventas de los modelos de 1960. Acudían a ver el Corvair y terminaban comprando el Chevrolet Biscayne Seis.

       Si les ocurre algo similar a los concesionarios del Buick, Oldsmobile o Pontiac, no habrá razón de compungirse pues se obtienen más ganancias vendiendo los grandes, aun si los precios son bastante aproximados.

       Después de leer este informe relativo a los diez días iniciales de venta, un dirigente de la GM observó con marcada satisfacción: "Los modelos grandes están saliendo muy bien, y parece que las ventas de compactos será un negocio suplementario". Esto significa que si resultan bastante buenas las ventas de los modelos rediseñados del Buick, Oldsmobile y Pontiac, la división correspondiente tendrá un buen año económico, aunque los compactos no tengan el éxito alcanzado por el Falcon, el año pasado.

       Un compacto que dará qué decir en el curso de este año es el Valiant, y posiblemente el Lancer -de la Dodge- cuyo precio es mayor.

       En los últimos meses, las ventas del Valiant han sido muy buenas, después de un comienzo muy lento. La razón que dan los complacidos jefes de la Chrysler Corporation es que el público se ha dado cuenta de que el Valiant les proporciona facilidad de manejo, comodidad de marcha y estabilidad de primer orden, como también el gran rendimiento del motor de 101 HP. Todo esto prácticamente a los precios más bajos.

       Era suficiente dar una mirada al gran Cobo Hall, en Detroit -de 221 metros de largo y 123 de ancho- donde se celebró la Cuadragésima Tercera Exposición Nacional de Automóviles, para advertir que nunca antes se habían congregado tantos autos y personas en un recinto.

       Al observar la refulgente vista -más de dos hectáreas y media de brillante cromo y alegres colores -no podía uno menos de maravillarse ante el enorme surtido de coches que se ofrece al público.

       La industria merece las más cálidas felicitaciones por las proyecciones y la magnificencia de la exposición, en general, y por el "Maravilloso Mundo del Automóvil", en particular. Esta fue una exposición de carácter semitécnico, formada por los grupos de fabricantes de diversos elementos, tales como los productores de caucho, frenos, muelles y componentes eléctricos.

       Fue, en realidad, un museo de la ciencia relacionada con la industria moderna de automóviles. Los que viven cerca de Detroit deben visitarlo afines de este año.

       El Córvair 95 y el Ford Economic, los nuevos camiones ligeros de corta distancia entre ejes, de la Ford y la Chevrolet, han despertado gran interés en el público.

       Según los informes iniciales, no se trata únicamente de curiosidad, sino de un considerable número de compras.

       Estos útiles vehículos son el resultado de un estudio del mercado que revela que la mayoría de las personas que usan camiones agrícolas y de reparto no conducen cargas lo suficientemente pesadas que justifiquen la capacidad y la fuerza de tracción de los camiones standard de media tonelada de hoy día.

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 29 - Febrero 1961 - Número 2



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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus