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Estás leyendo parte de la revista de Noviembre de 1960
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¿Se lubricará sólo
cada dos años? ¿Habrá silenciadores perpetuos? |
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NI MAS NI MENOS que
los guisantes de la misma vaina. Asi es exactamente como se describían
-en ese mundo de verdades inciertas, rumores y conjeturas- los compactos
de la Buick, la Oldsmobile y la Pontiac. Pero es difícil imaginarse
hasta qué punto pueden errar los pronosticadores. Si bien los tres
compactos tienen la misma envoltura -casi idénticas carrocerías
enterizas, fabricadas por la División Fisher de la GM-, se descubre
debajo de las vistosas cubiertas que los ingenieros de las divisiones decidieron
adoptar , más que nunca, sus ideas personales.
EL OLDSMOBILE F-85 y el Buick Special, comparten el mismo tipo
de suspensión, de eje motor y de transmisión manual. En cambio,
sus motores V -8 son bastante diferentes, con excepción del bloque
de aluminio. Los sistemas de transmisión automática son totalmente
diferentes.
El Pontiac
Tempest -un nombre bien escogidi- es el único de los tres
que tiene transeje de suspensión trasera independiente, lo cual contradice
lo dicho en esta sección el mes pasado. El Buick Special y el Oldsmobile
F-85 tienen "sólidos" ejes traseros del tipo empleado usualmente.
Y AQUI VA un
ejemplo de cómo se inician los rumores falsos. Nos referimos a la
creencia de que en el Tempest se iba a emplear suspensión de barra
de torsión, al estilo del Chrysler: La idea nació por el hecho
de que la Pontiac había pedido, a cierto abastecedor, barrils de
torsión en pares. ¡Cómo deben haberse reido los ingenieros
de la Pontiac! Los barras se emplearon como ejes motores.
Sin embargo, el Tempest está provisto del sorprendente motor de cuatro
cilindros, inclinado a 45 grados, o sea él primer seis que viene
con un coche de la GM desde el año 1928.
Los que deseen podrán obtener en el Tempest el suave y más
potente motor V8 fabricado de aluminio.
SE ESPERA QUE estos tres nuevos compactos serán bien acogidos
el año 1961. Constituyen la segunda fase de la revolución
de los autos compactos-la de .1os compactos diseñados con sentido
práctico y de precio medio. (La tercera y última fase será
la invasión de un gran número de autos de 1600 dolares, producidos
en Detroit, para cuatro pasajeros.)
El F-85, el Tempest y el Special ofrecen todas las características
típicas del auto grande de precio medio: suavidad de marcha, comodidad,
muy poco ruido, alto rendimiento y buena mano de obra. Lo mejor es que prueban
que se ha usado el sentido común. En estos autos de seis pasajeros,
que se distinguen por lo prácticos, todos los asientas son cómodos.
ESTOS NUEVOS AUTOS
probablemente afecten las ventas de los un tanto acosados "tres coches
baratos" (el Chevrolet, el Plymouth y el Ford, como también
del flamante Dodge Dart). Algunos ya han comenzado a sufrir la competencia
de los "cinco económicos" (Falcon, Rambler, Corvair, Valiant
y Lark) en las ventas de los modelos de 1960.
Todavía es difícil prever a qué extremo llegarán
las cosas para algunos de los autos bien establecidos, de las categorías
media y baja. Mucho depende, por supuesto, de los precios que tengan los
compactos de la Buick, la Oldsmobile y la Pontiac. Los conocedores suponen
que será de 2400 a 2700 dólares, y que el precio básico
del modelo de cuatro cilindros del Pontiac Tempest será de unos 2000.
SI ESTE ULTIMO PRECIO
es una realidad, sería una sagaz medida de S. E. Knudsen, el jefe
de la Pontiac, pues, en esa forma, el nuevo Tempest, de carrocería
más grande (con distancia entre ejes de 2,84 metros), podrá
competir con los compactos más pequeños, tales como el Falcon,
el Rambler y el Corvair. Si el precio del Tempest es menor, se deberá
a economías efectuadas en el motor. El Pontiac 4, de hierro fundido,
se fabrica en la misma línea de producción de los motores
grandes -es, en realidad, el lado derecho del V8 de 6,4 litros. Por lo tanto,
el costo del equipo de producción y el de fabricación son
considerablemente más bajos que en el nuevo V-8 de aluminio.
ALGO QUE ES particularmente
interesante en los modelos de 1961 se refiere a ciertas características
destinadas a mantener satisfechos a los dueños, una vez pasado el
entusiasmo que motiva el tener un nuevo coche.
Por ejemplo, todos los Ramblers saldrán de la línea de producción
con los sistemas del escape revestidos de cerámica. En esto consisten
los silenciadores perpetuos. Los tubos de escape y los silenciadores de
los coches 1961 de la American Motors, serán tan inoxidables como
la porcelana. Como esto se difundirá en toda la industria, las fábricas
de estos repuestos, cuyas ventas anuales son de un millón de dólares,
perderán sus mercados.
DESAPARECERA el incesante -para los que siguen al pie de la letra
las instrucciones -y molesto trabajo de engrasamiento como resultado del
nuevo sistema de lubricación adoptado por la Ford Motor Company.
Según se dice, los propietarios de los autos Ford, Mercury y Lincoln
Continental de 1961 sólo necesitarán hacer lubricar sus coches
una vez cada dos años, amenos que recorran anualmente más
de 16.000 kilómetros, que es el término medio en los Estados
Unidos. |
| Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 27 - Noviembre
1960 - Número 5 |
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