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Estás leyendo parte de la revista de Noviembre de 1953
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Grabador de Eje Flexible Impulsado por Motor de Aspiradora |
ESTE INSTRUMENTO grabador de eje flexible, que se caracteriza
por una unidad propulsora colgante que incorpora un motor adaptado de una
vieja limpiadora de succión, puede armarse prácticamente sin
costo alguno con materiales comunes que existen en todo taller pequeño.
El motor usado en la herramienta original fue adaptado de una antigua aspiradora
Hoover, del tipo que tiene un interruptor articulado montado de antemano
en la base. El motor en sí, que no requiere adaptación alguna,
se suspende de un bastidor hecho de hierro dulce, o de alambre de acero,
de 1/8", como se muestra en el grabado. La barra de soporte para la
flecha flexible se instala debajo del mencionado bastidor, mediante el empleo
de pernos de estufa largos; No.10-32, que se insertan en unos espaciadores
de tubo. La barra de soporte consiste en una pieza de acero plano laminado
en frío, cuyo centro se perfora y provee de rosca, a fin de acomodar
el buje de brida, hecho de latón, al cual se le fija la brida de
acoplamiento, de la flecha flexible. El tamaño del buje dependerá
de la flecha flexible que se tenga a mano; La flecha flexible puede adquirirse
con un árbol del mismo tamaño que el del motor, pero en caso
de ser menor, no quedará más remedio que usar un acoplamiento
reductor, torneado de latón, como el que se detalla en la página
143. Esta pieza se fija al eje del motor con un prisionero hueco. La extensión
macho en el otro extremo se ajusta a presión en el acoplamiento de
la flecha flexible, en cuyo lugar se fija con un pequeño pasador
cónico. El agujero en el buje de brida se escaria para que rebase
este acoplamiento. Con las partes en posición y alineadas correctamente,
se cortan los espaciadores de tubo al largo adecuado, y la barra de soporte
se asegura al bastidor de alambre del motor. |
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A
continuación, se construye el mango. Este se compone de una pieza
de madera dura conformada adecuadamente, un árbol de acero, dos cojinetes
de bolas sellados, una brida de acoplamiento provista de rosca, y un giramachuelo
que se altera para que sirva de mandril. Si usted no posee un torno para
madera en su taller; el mango puede elaborarse en un torno para metales
introduciendo a presión una flecha corta de 3/8" en un agujero
perforado en un extremo del bloque y asegurando aquélla en el mandril.
El otro extremo del trabajo se sostiene en el centro de la contrapunta.
La alimentación de la máquina puede usarse con madera dura
de veta angosta, tal como abedul o arce, y el torneado final es posible
llevarlo a cabo haciendo avanzar el trabajo a mano. Todavía mejor
es fijar un portaherramienta temporal al frente de la bancada del torno
y usar formones para madera. El grabado en la parte superior de la página
muestra cómo los asientos de los cojinetes de bolas están
aborcardados en cada extremo del mango, a fin de acomodar dichas partes
con un ajuste a presión. El agujero a través del centro del
mango es de 7/16" de diámetro, para que franquee el árbol.
Este se tornea de acero laminado en frío, a las dimensiones que se
ofrecen en el dibujo de la página 144. La brida de acoplamiento se
tornea de latón al tamaño que se indica y se le provee de
rosca para atornillar la tuerca moleteada de la flecha flexible. Una vez
que ésta se ha aprisionado a la manga, se inserta en el buje de brida.
A continuación, el árbol con el cojinete en su sitio se fija
también con pasadores a la manga, la tuerca moleteada se aprieta,
y el árbol se inserta en el mango. Finalmente, la brida se asegura
al mango. Como se ha mencionado, y se indica, el mandril se hace alterando
un giramachuelo pequeño. El mango original en T se elimina, se centra
y perfora un agujero ciego en el extremo de la cabeza, y el mandril se asegura
al árbol con un pasador cónico. Este debe estar perforado
con precisión, a fin de que el mandril gire correctamente. Usando
como guía el agujero original en el giramachuelo, se perfora un agujero
de 1/8" a través del árbol en el mango. Un pasador insertado
temporalmente en este agujero, impide que el árbol gire cuando se
aprieta el mandril. |
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Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 13 - Noviembre
1953 - Número 5 |
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