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Estás leyendo parte de la revista de Marzo de 1980
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Soporte de platos para su alacena |
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Este juego miniatura de anaqueles para una alacena
le permite colocar los platos de acuerdo con su tamaño, a fin de
que usted pueda quitarlos y colocarlos con rapidez y facilidad. También
puede adaptar la idea para guardar tazas, fruteros y otros artículos
de su vajilla. Además de ordenar las alacenas para facilitar el alcance
de los platos, este dispositivo le permite guardar un número mayor
de artículos.
Para construir el soporte de los platos, puede utilizarse cualquier madera
sólida o madera terciada de 1/2" (1,27 cm). El que aparece aquí
está hecho de madera de aliso y tiene un acabado de laca. Usted puede
modificar el plano de abajo para dar cabida a platos de otros tamaños
o a un número mayor de platos. Mida la distancia entre los anaqueles
de la alacena para determinar la altura máxima que pueden tener las
piezas laterales. Se usan únicamente juntas sencillas de tope. |
El soporte de platos que se ajusta bien en la esquina de
una alacena, permite guardar en forma ordenada platos de tres tamaños
diferentes |
Coloque el trabajo midiendo y trazando cuadriculaciones
de 1" (2,54 cm) en una hoja de papel. Para construir los anaqueles,
marque las dimensiones rectas de cada anaquel en el papel cuadriculado.
Luego determine los medios para las volutas. Las curvas en las piezas laterales
(A) armonizan con el diseño en general, pero pueden ser omitidas.
Use papel carbón y un lápiz para transferir el diseño
a la madera. Corte las piezas y líjelas hasta alisarlas bien con
papel abrasivo de grano 80 y luego de grano 120, antes de unirlas entre
sí. Sópleles el polvo y luego emplee un trapo para eliminar
las partículas finas de polvo que queden en la madera.
Una los anaqueles y los lados con once tornillos de cabeza plana No.10 de
1 1/2" (3,81 cm), introducidos dentro de agujeros perforados de antemano.
No se usa cola para que la unidad pueda desarmarse con rapidez, al objeto
de guardarla en otro lugar. Déle acabado a la madera con una lata
rociadora, siguiendo las instrucciones que vienen en el envase. -Bryan
M. Vincent |
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grande y claro |
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Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 33 - Marzo
1980 - Número 3 |
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