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Click para ver más grande Estás leyendo parte de la revista de Enero de 1948
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SOLAMENTE los motociclistas más audaces y arrojados tienen alguna probabilidad de salir victoriosos en las arduas pruebas de resistencia que anualmente llevan a cabo las asociaciones dedicadas a ese deporte. El promedio de velocidad quizá no pase de 38 kilómetros por hora, y sin embargo, dos terceras partes de los participantes abandonan por lo general la competencia antes de llegar a la meta final.
Lo que amilana a los motociclistas, a la vez que castiga sus máquinas, son los itinerarios que se eligen para estos eventos con un recorrido de 800 o 1000 kilómetros de caminos, senderos y secciones a campo traviesa, lo más accidentado posible.
Cierta pista del Oeste incluye una pendiente de 7 kilómetros cuesta abajo, de arcilla resbaladiza. Este tramo, que parece untado con grasa, obliga a los concursantes a recorrerlo de deslizándose y patinando peligrosamente hasta el fondo. La misma pista comprende 5 kilómetros de caminos de tierra suelta; Durante la época de las lluvias
  el motociclista necesita casi una hora de tenaces esfuerzos con su maquina para recorrer ese tramo. La famosa pista de Jack Fines, en el estado de Michigan, que atraviesa una zona boscosa, siguiendo antiguos senderos de leñadores, es tan resbaladiza, accidentada y peligrosa, que nadie ha logrado establecer una marca perfecta sobre ella.
En California, la pista de Greenhorn Mountain parte de Pasadena, y asciende hasta las cúspides de tres montañas a 2,100 metros de elevación, atravesando 150 kilómetros o cosa así de candentes desiertos. En las montañas se siguen viejos senderos abandonados, pero en el desierto la pista no es más que la huella dejada por una motocicleta una semana antes y cuyo rastro sirve de guía. De los 800 kilómetros de dicho recorrido sólo 140 son pavimentados. Los competidores van provistos de mapas y aún cuando todos los recodos
están señalados con letreros y simbolos, muchos de los motociclistas pierden valiosísimos minutos y hasta horas enteras cuando equivocan el camino y se extravían.

Al patinar en una curva, el motociclista apoya en el suelo la bota reforzada de acero, para equilibrar la máquina. Usa un fuerte casco, calzones de cuero y botas. El motociclista, abajo, necesitaría traje de baño

Otra pista famosa es la de Sandy Lane, que comienza en Camden, Nueva Jersey. Aquí fue donde se realizó el campeonato de resistencia de 1947. Mide 800 kilómetros de largo y atraviesa arenales profundos, accidentados caminos rurales, y estrechos y serpenteantes senderos. Los competidores se ven obligados a marchar en primera velocidad durante casi todo el trayecto.
Las pruebas de resistencia no son carreras de velocidad. Estas competencias marcan un itinerario fijo y los
Al campamento nocturno. El. regreso se inicia al día siguiente, por una ruta distinta, y termina en el punto de partida. Algunos de los concursantes son eliminados mucho antes de terminar la primera etapa pues, completamente agotados, no pueden proseguir. La mayoría de los que continúan en la prueba, habrán sufrido una o dos caídas antes de llegar al. campamento donde pasarán la noche. Algunas de las máquinas se descomponen y son eliminadas, y no pocas llegan a la meta con algún desperfecto mecánico.
motociclistas deben esforzarse por llegar a cada uno de los numerosos puntos de control, en el tiempo fijado. El corredor conoce de antemano la ubicación de determinados puntos de control, pero existen además otros controles- "secretos" que encuentra a su paso inesperadamente. Por cada minuto que llegue tarde a los puntos de control, pierde un punto en el cómputo final. Puede llegar 29 minutos antes del tiempo pre-establecido, pero si llega con 30 minutos o más de anticipación, se le descalifica.
En los numerosos concursos de resistencia que organizan anualmente los diversos clubs estadounidenses de motociclistas, toman parte de 50 a 100 pilotos. Las pruebas más largas toman dos días y los ciclistas cubren unos 400 kilómetros el primer día. Las bolsas de dormir y los alimentos se llevan en camión
  Los pilotos llevan consigo repuestos de cadena, un distribuidor, herramientas, una cámara neumática y una bota. Las pruebas de resistencia son competencias libres y los pilotos pueden usar cualquier clase de máquina que deseen, modificada como mejor les parezca. Los silenciadores de escape y el fanal delantero deben conservarse si el trayecto incluye alguna carretera pública. Para facilitar el correr sobre tramos accidentados, la mayoría de los motociclistas equipan sus motos con ruedas de mayor diámetro o bien emplean horquillas más largas. Las nuevas horquillas delanteras "hidráulicas" que llevan en su interior un amortiguador, y los manubrios montados sobre gomas, son muy populares entre los corredores de resistencia.


Arr. Para proteger las piernas del calor se ajusta un protector de asbestos sobre el tubo de escape. Der. La moto brinca al pasar una colina. Abajo, un concursante descansa, mientras el mecánico cambia el carburador de la moto
 
Los amortiguadores hidráulicos en la horquilla delantera, absorben muchos de los golpes inevitables en caminos accidentados, en tanto que los manubrios montados sobre gomas reducen la vibración en cualquier superficie.
Las motocicletas con "side-car" constituyen una categoría especial en las carreras de resistencia. Por lo general, la barquilla tiene una puerta posterior para que el acompañante pueda saltar sin pérdida de tiempo y empujar la máquina en las cuestas pronunciadas o en los arenales. El acompañante viaja por lo general arrodillado, listo para inclinarse a derecha o izquierda, para estabilizar el vehículo en las curvas cerradas. Algunas combinaciones de motocicleta con barquilla vienen equipadas con ejes especiales de modo que ambas ruedas traseras hagan tracción.


Izq. El competidor aguarda la señal de partida. Los neumáticos de la foto (arriba) son: Izq., para pavimento; los dos del centro, para pavimento y tierra; y el de la derecha es para competencias de resistencia

Muchos de los concursantes reacondicionan los motores de sus máquinas, para que rindan un 50 por ciento más de potencia. Entre los cambios que se hacen con mayor frecuencia, se cuenta el aumento del coeficiente de compresión, mayor carrera al pistón, y más velocidad al árbol de levas. A menudo se modifica la forma de las cámaras de combustión y el peso de las válvulas de admisión se reduce, rebajando a esmeril el metal de la parte plana de la cabeza. Todas las piezas que entran en movimiento, son balanceadas con precisión. Todas las superficies donde hace contacto el aceite lubricante, incluyendo el interior del cárter y el volante, se pulen esmeradamente para reducir la fricción.
Un motor ordinario de 45 pulgadas cúbicas, cuya velocidad original sea de aproximadamente 135 kilómetros por hora, puede rendir 185 kilómetros por hora mediante cambios como los citados. En las pruebas de resistencia, la alta velocidad rara vez representa un factor decisivo, pero los motores reacondicionados suministran mayor potencia en los cambios de baja velocidad. Esto es de suma importancia en los arenales y al escalar pendientes pronunciadas.
  Los motociclistas toman parte en mayor diversidad de competencias que los aficionados a otros tipos de vehículos; y por esta razón, los clubs de motociclistas cuentan con un elevado número de miembros. Los clubs afiliados a la Asociación Americana de Motociclistas, patrocinan gran variedad de eventos, incluyendo carreras en pistas cortas, escalamiento de colinas y pruebas de regularidad que duran uno o dos días, que son semejantes a las competencias de resistencia. Las carreras en pistas cortas son para expertos, aún cuando hay eventos especiales para novatos.
También son muy populares los torneos, en los cuales los miembros de los clubs compiten en diferentes pruebas, así como los llamados torneos ingleses, en los cuales se clasifica según el correcto manejo de la máquina en una pista corta y accidentada. En estas pruebas existen castigos especiales cuando se toca tierra con los pies, cuando se deja apagar el motor, y otros errores. En la prueba "caza del zorro", un motociclista parte con mucha ventaja y otros le siguen a campo traviesa, tratando de darle alcance. Esta competencia es también muy popular.
     
Señales empleadas en la pista; Cuelta derecha, vuelta equivocada, derecho adelante, y vuelta a la izquierda

Los torneos culminan, por regla general, en las llamadas carreras TT , abreviación de: "Trofeo Turista." Los motociclistas declaran, sin embargo, que TT quiere decir "tumbos y tropiezos." Las pistas TT son circulares y miden aproximadamente un kilómetro de largo con todos los obstáculos y situaciones difíciles que puede uno encontrar en viaje a campo traviesa, con excepción de obstáculos acuáticos. Hay pronunciadas curvas a derecha e izquierda, secciones accidentadas, pendientes difíciles, y colinas cortas en 'las pistas TT.
Esa clase de pista representa una de las pruebas más duras para el motociclista que trata de recorrerla a toda velocidad. Durante una carrera se ven 20 ó 30 máquinas, y las caídas y choques son cosa frecuente. Para protegerse, los pilotos usan gafas, cascos acolchados, gruesas tricotas, pantalones de cuero; botas, y largos guantas de cuero. El zapato izquierdo va protegido por una placa metálica que cubre toda la puntera, para que el motociclista pueda apoyarse y equilibrar la máquina y pivotear cuando encuentra una pronunciada curva a la izquierda.
Lo mejor, o peor, de los recorridos "TT", según el punto de vista que se adopte, es aquél situado en Riverside, California, denominado Box Springs que fuera escenario del campeonato nacional en 1947. Skit Fordyce, uno de los patrocinadores del evento, pasó un mes en busca de una ruta satisfactoria para el campeonato, antes de escoger la traicionera pista de Box Springs. Escogida ésta, se acentuaron las pendientes para hacerla aun más dificultosa que lo que eran. Prácticamente cada vuelta de la pista es un desafió a la habilidad del competidor. Con una extensión de l000 metros, es posible recorrerlo íntegramente en 50 segundos a una velocidad de 60 kilómetros por hora, pero esto es imposible.
 
  Momentos de una prueba de ascensión de cuestas. Arriba. el participante se esfuerza por gobernar su máquina. y abajo. al pasar la cima de la cuesta ambas ruedas apártanse del suelo
 
     
Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 2 - Enero de 1948 - Número 2
     


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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus