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Click para ver más grande Estás leyendo parte de la revista de Octubre de 1959
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Por el Dr. Dan Q. Posin
CATEDRATICO DE FISICA DE LA UNIVERSIDAD
DE DE PAUL Y CONSULTOR Y ASESOR
CIENTIFICO DE LA COLUMBIA BRDADCASTING SYSTEM
LA COMPETENCIA ha comenzado. Algún día, en una fecha cercana, se anunciará
que una nave del espacio, tripulada por hombres, ha iniciado el viaje a la Luna. ¿Cuándo tendrá lugar ese acontecimiento? ¿Serán norteamericanos los tripulantes? ¿O
serán rusos? ¿Pero por qué debe el hombre -ya sea ruso o norteamericano -ir a la Luna ? ¿Hay algún
propósito que justifique este costoso y peligroso proyecto? Los hombres irán a la Luna, simplemente, porque la era espacial ha llegado. No podemos
detener el progreso en lo que ala ciencia sobre el universo se refiere. La competencia con
los rusos, como es natural, resulta un acicate. Pero la Luna en sí tiene muy poca importancia para las necesidades militares. Estamos en nuestro camino -así por lo menos creemos -debido al espíritu de aventura, porque la Luna está "allá" y podemos llegar hasta ella. Los habitantes de la Tierra-norteamericanos, rusos, y todos los otros-tienen una cita con el universo. La hora ha llegado. Estamos, pues, en camino. ¿ Tiene en realidad importancia quién llegue primero a la Luna?
 
Fotografía del traje de presión ideado por los rusos para proteger a sus aeronautas espaciales. Ab.: Concepción del autor sobre el primer viaje a la Luna
     
Algunos hombres que miran la majestuosidad del espacio desde este diminuto planeta, se inclinan a considerar el universo como otro campo de batalla para las angustias que sufrimos en la Tierra. Otros ven la exploración del espacio como una aventura tentadora, y aun otros la consideran como una oportunidad para un formidable progreso en el campo de las investigaciones científicas. Cualesquiera que puedan ser sus motivos, escuchemos las opiniones de los protagonistas en esta carrera a la Luna.
A. Dorodnitsin, miembro de la Academia de Ciencias Rusa dice: "La creación del primer planeta artificial demuestra que la técnica soviética en la fabricación de cohetes se halla en una etapa sumamente avanzada en la conquista del cosmos. .."
A. Ilyushin, miembro también de la Academia de Ciencias Rusa declara: "El éxito alcanzado por el cohete, cuya última sección de 3244 libras está ahora dando vueltas alrededor del Sol, demuestra que la ciencia y la tecnología soviéticas cuentan con los requisitos previos necesarios para el próximo paso hacia adelante ..."
Y el profesor V. Dobronravov, Doctor en Ciencias Físicas y Matemáticas, dice: "Algunas de las rutas para un vuelo a la Luna han sido determinadas ya. .."

Los navegantes norteamericanos tal vez usen este tipo de traje que ya ha sido probado en un laboratorio donde se reprodujeron las condiciones del espacio

 
     
Tsiolkovsky el precursor ruso de los viajes espaciales del futuro El precursor norteamericano fué el Dr. Goddard, Que predijo que un cohete de tipo múltiple, de 20,000 libras, podría lanzarse hasta la Luna
     
¿Serán estas declaraciones simple propaganda? Wernher von Braun, experto norteamericano en la materia, declaró en enero ante un Comité del Senado Norteamericano lo siguiente: "Los Estados Unidos necesitarán cinco años para emparejarse con los rusos en el campo de los proyectiles balísticos intercontinentales, aunque los norteamericanos dediquen todas sus actividades a ese objetivo . . . El Mechta ruso (que se disparó más allá de la Luna para que describiera una orbita alrededor del Sol) probó otra vez que los cohetes de los soviéticos son más poderosos que los de los norteamericanos, y que su dirección era muy exacta . . ."
A fin de proyectar los progresos en un futuro cercano, vale la pena echar un vistazo al
pasado. Hay dos hombres realmente extraordinarios en la historia de los cohetes, uno ruso
y el otro norteamericano.

Tsiolkovsky: Precursor Ruso

Los navegantes espaciales rusos veneran a Konstantin Eduardovich Tsiolkovsy. Este nació en 1857, y era un maestro de escuela autodidacto quien, hace 80 años, empezó a pensar seria y científicamente en el viaje del hombre al espacio. Era tímido y sordo, pero se impuso a sí mismo la tarea cósmica de usar las leyes de gravitación y de movimiento planetario del gran Isaac Newton como un trampolín mediante el cual los habitantes de la Tierra podrían ascender al espacio.

  Tuvo gran éxito al demostrar que el cohete era el único motor que podía utilizarse en viajes espaciales, y por medio de las matemáticas obtuvo la velocidad que los gases de escape tendrían que desarrollar para disparar el cohete fuera de la Tierra. También llegó a la conclusión de que el combustible debería ser líquido, y escribió esto en 1898, cuando los hombres no habían volado ni siquiera en aviones. Gracias a Tsiolkosvsky, Rusia se inició en la era de los cohetes y viajes en el espacio. Cuando se libró la batalla de Stalingrado, los rusos tenían a su disposición una formidable provisión de cohetes.

También los Estados Unidos tuvieron un hombre muy destacado: Robert Hutchings Goddard, un profesor de física. Sin embargo, Goddard tuvo una gran desventaja: nació un cuarto de siglo después que Tsiolkovsky; pero no obstante, logró muchos progresos en el estudio de los cohetes, tanto en el campo experimental como en el teórico. Predijo por teoría que un cohete de varias secciones que pesase 20.000 libras podría impulsar un pequeño dispositivo hasta la Luna.

 
Arr.; Concepción ruso de la estación espacial, con brazo giratorio que produce sensación de gravedad
Arr., der.: Concepción norteamericana. Se compone de una doble rueda que gira para crear la gravedad

La nave rusa tal vez sea menor que la americana->

Los periodistas se burlaron de él por su creencia de que un cohete podría impulsarse a sí mismo a través de un vacío. Goddard, que era tímido como Tsiolkovsky, se afectó con estas críticas y trató de evitar que se enterasen de sus estudios, pero no desmayó en su empeño. En 1926 realizó sus primeros experimentos de vuelo, pero en 1929 estaba tan preocupado con los problemas que originaban el ruido de sus cohetes, que buscó refugio en los desiertos de New Mexico. Allí, bajo un Sol muy brillante en 1935, lanzó un cohete que ascendió 2300 metros. A partir de esa fecha, pequeños grupos de hombres en los Estados Unidos empezaron a pensar seriamente en un viaje a la Luna.

Era de los Sputniks

Después, súbitamente aparecieron los Sputniks. El primero, en octubre de 1957, era ruso
y pesaba 184 libras. Más tarde, esa misma nación lanzó otro, de 1110 libras, con el primer
tripulante viviente; y luego uno de 2925 libras. Posteriormente, los Estados Unidos lanzaron el primero, con un peso de 3 libras, y después otro de 31 libras.

 
     


  Duplicado del 5putnik III de los rusos: el satélite más pesado lanzado hasta el día de hoy (2925 lbs.)
Los Estados Unidos comenzaron entonces a trabajar febrilmente en su afán de alcanzar a Rusia, pero ésta no detuvo sus progresos. En enero, los rusos lanzaron su Mechta que pesaba 3245 libras (796 libras de carga útil, y 2445 libras la sección final). Voló fuera de la Tierra, pasó la Luna, y continuó su viaje hasta establecer su órbita alrededor del Sol. Dos meses más tarde, los norteamericanos siguieron a los rusos con otro de 131/2 libras de carga útil.
Después, los Estados Unidos se superaron con el Discoverer, de 1300 libras, aunque no todas de carga útil. ¿y no habían los norteamericanos colocado en órbita un Atlas completo con motor sustentador? ¿Cuánto pesaba? ¡80.800 libras, y medía 26 metros de largo!

"Los Felicitamos, Pero. .."
Los rusos sonrieron. "Nosotros no contamos los cascos vacíos", dijo el Dr. Leonid Sedov,
Presidente de la Comisión de Astronáutica de la Academia de Ciencias Rusa. "Nosotros los
felicitamos, pero solamente contamos la carga útil: instrumentos y pasajeros. ¿Cuánto pesaba su carga útil ? Únicamente 133 libras. Eso es menos que la carga útil de cualquiera de nuestros tres Sputniks. Nosotros no contamos los cascos. ¿Es que debíamos haber contado, por ejemplo, el casco de la tercera sección del Sputnik III?"
Sería humillante para nosotros que se contara esa tercera sección. j Según mis cálculos, debe de haber tenido unos 30 metros de longitud, y 11.000 libras de peso!
Sin embargo, los norteamericanos estamos progresando. No volveremos a lanzar pequeñas naves al espacio. El empuje total del Atlas de tres motores fue de 360.000 libras. Los rusos probablemente usaron un cohete de tres secciones para lanzar el Mechta, y el empuje de la primera sección solamente quizás era de 700.000 libras. No obstante, parece que nos es- tamos aproximando a los rusos. El profesor Herman Orbeth, el Tsiolkovsky o el Goddard de Alemania, dijo recientemente. "El programa espacial ruso posiblemente no aventaje en este momento más de tres o cuatro Dieses al de los norteamericanos."
Pero Krafft A. Ehricke,. experto en cohetes de la Convair Division of General Dynamics Corporation, declaró en enero: "La presente ventaja rusa se estima en unos 18 ó 20 meses."
Mientras tanto, muchos norteamericanos se disputan el honor de tripular la nave que haga
el primer viaje a la Luna. Unos 25.000 hombres en los Estados Unidos se han ofrecido como voluntarios. Se han recibido cartas en todas las dependencias del gobierno, hasta en aquellas remotamente relacionadas con los proyectos espaciales. "Hemos dejado de llevar la cuenta", dice William Coleman, comandante de las Fuerzas Aéreas. Muchos de ellos son casados y tienen varios hijos.
Pero los primeros siete hombres ya han sido seleccionados en medio de gran pompa, y la cápsula que conducirá al tripulante está ahora en construcción. El año señalado es el 1961.
     
 
El Atlas. de EE. UU.. en el momento de su lanzamiento. Esta muy bien puede ser la nave espacial ideal

Experimentos en el Espacio
Además, los Estados Unidos preparan actualmente un experimento de reconocimiento en el espacio: un avión grande que libera uno más pequeño conducido por un piloto ( el X-15) el cual se elevará 160 kilómetros, y entonces descenderá para penetrar ligeramente en la atmósfera y subir de nuevo, acción que repetirá varias veces. Este proyecto y muchos otros son considerados como pruebas necesarias, antes de que pueda efectuarse el viaje a la Luna por los astronautas norteamericanos.

¿Realizarán los rusos tales pruebas? ¿O declararán temerariamente que se dirigirán a la Luna inmediatamente?

Los soviéticos han hablado de vuelos experimentales similares al del X-15. Probablemente también envíen hombres; y posiblemente mujeres. Pero hay abundantes evidencias de que aun ahora ya ellos están listos para llegar hasta la misma Luna.
Tanto los rusos como los norteamericanos están realizando intensas investigaciones pertinentes para descubrir cómo puede el ser humano resistir los rigores de un viaje a la Luna.
No solamente los soviéticos lanzaron su famoso Laika alrededor del mundo, sino que el 27 de agosto de 1958 (y esto lo saben muy pocas personas)

  Concepción rusa de la nave transporte, con reforzadores para planear en el viaje de vuelta a la Tierra

lanzaron otros dos perros a una altura de 450 kilómetros. Tanto los perros como los instrumentos se recuperaron con éxito. También han realizado otros lanzamientos con
animales. Es ahora que los norteamericanos empiezan a tener algún éxito en el lanzamiento
de animales. Pero los animales rusos fueron los verdaderos iniciadores de estos vuelos espaciales.

En vista de esto, espero que nosotros los habitantes de la Tierra llamados norteamericanos nos enteraremos dentro de los próximos seis meses de que Rusia ha lanzado el primer pasajero humano al espacio y que ha regresado sano y salvo.

Recientemente, el profesor G. v. Petrovich, de la Academia de Ciencias Rusa, dio a conocer
otros proyectos al declarar que "La Unión Soviética está realizando investigaciones espaciales simultáneamente en varios campos: la creación de nuevos satélites terrestres, con
tripulación y sin ella; intensos estudios sobre la Luna; vuelos interplanetarios, incluyendo
el lanzamiento de satélites adicionales alrededor del Sol; y estaciones espaciales tripuladas,
a decenas de miles de kilómetros de la Tierra."

     
Estas estaciones podrían usarse como puntos intermedios en los viajes de las naves espaciales desde la Tierra a otros planetas.
Rusia también creará satélites artificiales alrededor de la Luna, y colocará "suavemente" sobre ésta grandes recipientes con instrumentos científicos y cámaras de televisión.
Los soviéticos tal vez lancen en parejas sus naves tripuladas a la Luna. Así, en caso de que una nave de éstas se dañe al aterrizar, todos los exploradores pueden regresar en la otra. "En lo que a viajes interplanetarios se refiere, la Unión Soviética ya dispone de cohetes que pueden volar hasta Marte y Venus", dice el referido profesor.
Son muchos los que piensan en los Estados Unidos que aun cuando los rusos han desarrollado cohetes mucho más potentes, su sistema de dirección e instrumentos científicos son, en general, inferiores a los de los norteamericanos. Esta conclusión, como ha señalado von Braun, no se basa en los hechos. Tanto el Mechta de los rusos como el Pioneer IV de los norteamericanos fueron dirigidos a la Luna; el Mechta falló por unos 6450 kilómetros, mientras que el Pioneer falló por 56.335.

Buenos Sistemas de Dirección
Además, consideremos los perigeos (altitudes mínimas} de los tres Sputniks, los cuales fueron de 226,42 kilómetros, 223,49 kilómetros y 225,40 kilómetros. Estas cifras indican que el sistema de dirección era bueno.
Como es natural, lo que se consiga en el espacio está relacionado con los progresos científicos en tierra. Nos engañamos de lleno, si pensamos que los rusos son capaces solamente de lanzar proyectiles al espacio, y que no son competentes en electrónica, en investigaciones nucleares, y en química y física teóricas. Nada más incierto. Rusia dispone, en primer lugar, de un rompe átomos que es la maravilla del Occidente: un dispositivo con una potencia de diez mil millones del electronvoltios. Su programa de investigación geofísica es muy amplio; su química es óptima, y está dirigida por el profesor Semenov que recientemente recibió el premio Nobel; su física es formidable, , con tres hombres quienes hace muy poco tiempo ganaron el premio Nobel por el Efecto de Cerenkov; y sus matemáticas han sido siempre excepcionales.

Visión Impresionante
El Dr. J. w. Townsend Jr., del Laboratorio de Investigaciones de la Marina Norteamericana, al ver una copia del Sputnik III y de sus instrumentos en la Conferencia del IGY en Moscú, declaró lo siguiente: "Esto fué algo impresionante. De lo que observé llegué a la conclusión de que este satélite constituyó un extraordinario triunfo científico .."
El profesor R. E. Marshak, director del Departamento de Física de la Universidad de Rochester, que asistió a la conferencia celebrada en Moscú sobre partículas de alta energía, dice: "La Unión Soviética no escatima esfuerzo alguno para proporcionar el apoyo financiero necesario a las investigaciones científicas. En Rusia, el estipendio de un estudiante graduado es superior al salario de un obrero no especializado; y el sueldo de un científico destacado es 50 veces mayor que el de un obrero ordinario. Los incentivos espirituales son tan importantes como los materiales. Me parece que ambos incentivos en este país (E.U.A.) no son suficientes para persuadir al científico o al ingeniero a fin de que permanezca en la universidad, que es el lugar donde se realizan la mayoría de las investigaciones y se adiestran en sus tareas 10s científicos e ingenieros nuevos. .."

¿Qué Encontraremos en la Luna?
Los rusos están en camino hacia la Luna, al igual que los norteamericanos. No me cabe duda de que ambos llegaremos a ella. ¿Qué encontraremos allí? ¿Es cierto que el astrónomo ruso Kozyrev vió una explosión volcánica en la Luna? ¿Posee la Luna un campo magnético? ¿Está hecha con los mismos materiales que la Tierra? ¿Nos proporcionará el estudio del polvo de la Luna algunos indicios sobre el origen bioquímico de la vida? ¿Pueden vivir en la Luna los habitantes de la Tierra? ¿Cuál es la naturaleza de la tenue atmósfera lunar?
Estas, por supuesto, son las preguntas científicas que comúnmente se hacen todos los hombres. Los científicos, por lo menos, están mucho más interesados en las respuestas de esas preguntas, que en el problema sobre quién llegará primero a la Luna.
¿Iremos directamente desde la Tierra a la Luna ? Esto es posible, pero no muy práctico. Toda evidencia indica que los Estados Unidos no enviarán un solo hombre a la Luna, sino una expedición. Para una expedición de la Tierra a la Luna, de, digamos, 25 hombres, se necesitaría una nave espacial muchas veces mayor que el edificio Empire State. Resultaría mucho más eficaz usar una flota de cohetes que describiese una órbita de quizás 800 kilómetros sobre la Tierra. allí, los hombres podrían construir una estación espacial y una o más naves para el viaje a la Luna.

Se Podría Visitar la Luna Ahora
Es posible aún ahora, por supuesto, enviar un hombre a la Luna, mediante un método dificultoso: una sola persona metida en una cápsula diminuta con la cantidad de combustible exactamente necesaria para llegar a la Luna, aterrizar y lanzarse él mismo de regreso a la Tierra; En el momento presente, sus posibilidades de sobrevivir serian muy escasas (por cuya razón no intentamos hacerlo).
Por lo tanto, los Estados Unidos, al menos, no enviarán un solo hombre directamente desde la Tierra. Nuestro programa está ya acordado, y no comprende nada tan descabellado. Construiremos una elegante estación espacial para acomodar alrededor de 50 hombres, que llegarán después, tal vez en dos naves de pasajeros y en una de carga. En la portada de la presente edición (meramente simbólica) aparecen las naves de pasajeros, tanto la de los rusos como la de loS norteamericanos. Algunas de las grandes esferas para el combustible, posiblemente se descartarán a fin de aligerar la carga. Los rusos tienen una nave para realizar el viaje a la Luna, que es relativamente modesta. La nave de los norteamericanos es más elegante, mayor y con una tripulación más numerosa.

Este, es quizás, el punto capital de todo el problema norteamericano referente al espacio, en comparación con el de Rusia. Nuestro plan es de grandes proporciones, ya largo plazo, mientras que el de los rusos se basa en poner en práctica la idea una vez concebida.

El incentivo es extraordinario. Los rusos creen que el hombre se adueñará del universo. Los norteamericanos asienten: "Muy bien, el universo. Pero conquistado sin grandes riesgos, cómodamente, respetando la dignidad del hombre, con duchas en nuestras naves espaciales, con tripulaciones numerosas, acompañados, sin problemas psicológicos ni incompatibilidades, y con amistad." En cambio los rusos cuando hallan algo que puede dar resultado lo ponen en práctica sin dilación.
En realidad, es muy posible que los rusos no esperen a construir una estación espacial, sino que envíen desde la Tierra un grupo de pequeñas naves espaciales de un solo tripulante, cada una de cerca de 5 metros de largo y 2 de ancho. Esto sería la carga útil, por supuesto, después que el cohete abandone la atmósfera. Sería un viaje lleno de contratiempos, sumamente difícil. Pero como dicen los rusos, el premio será el dominio del cosmos.
La carrera a la Luna ha comenzado. Estoy seguro que la primera nave espacial aterrizará en la Luna en los próximos cinco años. y si los acontecimientos se siguen desarrollando como hasta hoy, los primeros hombres que llegarán a la Luna no serán norteamericanos.

     
Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 25 - Octubre de 1959 - Número 4
     


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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus