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La fábrica de antimateria
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Por Jim Wilson |
Los
físicos creen que se encuentran a punto de resolver el gran
enigma de la antimateria. Ésta es como la materia ordinaria
excepto por un detalle: su carga es opuesta. Sus partículas
no se comportan de forma diferente a la materia ordinaria. pero si la
materia y la antimateria se tocaran. ambas desaparecerían en
un destello de fuego subatómico.
Sin embargo. la existencia de la antimateria ha generado importantes
interrogantes científicas. "Si se crearon cantidades iguales
de materia y antimateria. ¿por qué existe el piso
firme sobre el cual estamos parados?" cuestiona Jonathan Dorfan,
líder de la fábrica B Asimétrica, un
ambicioso proyecto de física. en el Centro de
Aceleración Lineal de Stanford (SLAC) en Stanford.
California.
Luego dė que la antimateria fuera propuesta por vez primera por Paul
Dirac en 1928, el tema nunca se retomó sino hasta que se
aceptó la teoría del Big Bang (o Gran
Explosión) que dio origen al universo. Los
científicos descubrieron que se enfrentaban a un enorme
rompecabezas.
Algunos cosmólogos creen que la antimateria desaparecida se
encuentra en el universo y que en ocasiones se transforma en materia
real. No obstante, la principal comunidad de físicos
favorece una explicación más sutil: una
teoría llamada Violación de la Paridad de Carga
(o VPC), la cual sugiere que transformar materia en antimateria es un
poco más difícil de lo que se había
pensado y no al revés, Lo importante, en este momento, es
demostrarlo.
Masas de antimateria
Durante la década pasada, científicos alrededor
del mundo han reconocido que los mesones B (que son producidos cuando
los electrones y los positrones chocan) permiten estudiar diferencias
fundamentales entre la materia y la antimateria. Por este motivo, 600
físicos de nueve países persuadieron a sus
gobiernos para invertir U.S. $267 millones en la
construcción de la fábrica B.
Se seleccionó a SLAC para albergar el dispositivo ya que
gran parte del equipo para producir antimateria ya se encontraba
ahí, como producto de experimentos anteriores. Se hizo una
conversión de la vieja máquina de colisiones de
SLAC -conocida como PEP-, la cual consistía en un acelerador
de 3.2 km de largo que producía electrones y positrones de
alta energía, así como un anillo de 1.6 km
alrededor del cual las partículas se aceleraban en
direcciones opuestas.
El nuevo equipo permite que electrones a 9,000 millones de voltios
choquen contra positrones de antimateria que poseen una carga de 3,100
millones de voltios, Esto permitirá a los
científicos señalar con precisión en
qué momento las partículas se desintegran, al
igual que medir su tiempo de vida y otras propiedades con una exactitud
mayor de lo que puede hacerse en máquinas similares.
la corriente de los mesones B y de sus antimesones se examina con un
detector llamado BaBar, que es un equipo de 1.200 toneladas que
contiene 27,000 cables suspendidos en una cámara de gases,
junto con 192 barras de cuarzo precisamente distribuidas, una capa de
8.500 cristales de cesio, un anillo de 19 placas de hierro y un
poderoso equipo de cómputo.
La gran carrera
Por su parte. el Laboratorio Nacional de física de Alta
Energía de Japón (KEK por sus siglas en
japonés), trabaja al parejo de los científicos de
California. El aparato nipón que se encuentra en Tsukuba
también produce corrientes de mesones B y anti-B, y cuenta
con un sistema de cómputo lo bastante poderoso como para
clasificar los desperdicios resultantes de las colisiones. Una semana
después de que se realizó la primera prueba en
California el verano pasado, los japoneses anunciaron que
habían concluido su respectivo experimento y que, hasta ese
momento, los resultados eran exitosos.
En el pasado, anomalías como la superioridad de la materia
sobre la antimateria han provocado nuevos discernimientos acerca de la
naturaleza de nuestro universo. Algunos investigadores creen que los
resultados de los experimentos de ambos centros podrían
tener un impacto similar.
Para el próximo año, los físicos
deberán reunir suficiente información que permita
determinar si la VPC puede considerarse como una teoría
válida. Si llegara a ser aceptada, la principal comunidad de
físicos permitirá que los resultados se estudien
ampliamente. Pero si falla, el grupo tendrá que buscar una
mejor explicación que nos permita comprender la forma en la
que el universo completo funciona. |
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Fuente: Revista Mecánica
Popular - Volumen 52 - Noviembre 1999 - Número 11 |
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