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Estás leyendo parte de la revista de Marzo de 1956
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 CON
LA AYUDA DEL BEVATRON de la Universidad de California, el cual desarrolla
una energía de varios miles de millones de voltios-electrones, un
grupo de expertos en física nuclear (foto de la derecha) ha descubierto
una nueva partícula que se denomina ."antiprotón."
Esta nueva partícula aumenta las posibilidades de liberar, de modo
controlado, una energía considerablemente mayor del átomo
que la que se obtiene ahora con el método de fusión. Todos
los elementos naturales, excepto el hidrógeno, están constituidos
por protones, neutrones y electrones. El antiprotón, que es un protón
negativo, anularía la fuerza de enlace del protón, y entonces,
los neutrones y electrones se dispersarían al no existir factor alguno
que los mantuviera unidos. Por lo tanto, el antiprotón es un desintegrador
que actúa contra la base misma de la estructuración de la
materia. Lo más afortunado es que no puede usarse como un instrumento
de destrucción, tal como un cañón o una bomba.
* * *
Continuamente se encuentran nuevas formas de utilizar los subproductos de
los radioisótopos. Uno de los últimos descubrimientos es evitar,
mediante el empleo de la radiación, la pérdida anual de 300.000.000
de dólares, o sea el valor de los daños que han venido ocasionando
unos insectos en los cereales, como también en la harina y otros
productos obtenidos de los mismos. De acuerdo con L. E. Brownell, de la
Universidad de Michigan, los subproductos de los radioisótopos de
los reactores atómicos pueden usarse como un fuente barata de radiación
para tal fin. Según los experimentos efectuados, se ha comprobado
que la radiación no altera el sabor ni las cualidades de panificación
de la harina. Se ha ideado un método para tratar 27 toneladas por
hora a un costo de seis dólares.
* * *
En los invernaderos herméticos que hay en el Laboratorio Nacional
de Argonne, sé ha producido en una forma radiactiva el cornezuelo
de centeno, un honguillo en forma de espolón de gallo. Dado que no
puede obtenerse por síntesis  ninguno
de los extractos del cornezuelo, el principal empleo del material radiactivo
será en operaciones de análisis y separación con el
objeto de registrar la existencia de las concentraciones de alcaloides que
no pueden encontrarse por medio de ensayos de laboratorio. Este honguillo
"marcado" o identificado de esta manera puede ser usado para buscar,
en el cornezuelo, alcaloides desconocidos o que no se hayan identificado
debidamente. Además es posible ahora estudiar la acción de
los alcaloides en el sistema nervioso y en el muscular.
A fin de obtener cornezuelo radiactivo, se inoculó bióxido
de carbono radiactivo en centeno canadiense de primavera, durante el período
de su crecimiento (véase la fotografía de la izquierda) ;
Luego, al florecer las plantas, se les inyectó un hongo, obteniéndose
poco después, como resultado, un crecimiento semejante aun espolón
de gallo en el lugar donde se aplicó la inyección. De este
crecimiento se extrae el hongo, y como quiera que la planta se halla en
estado radiactivo, el hongo en cuestión: tiene también esa
característica. |
Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 18 -
Marzo 1956 - Número 3
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