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El verdadero rostro de Jesús
Avances
en la ciencia forense revelan
al rostro más famoso de la historia.
Por Mike Fillon
Desde la primera ocasión en que los niños
van a misa o asisten al catecismo. la imagen de Jesucristo entra en sus
mentes. En el continente americano suele representársele como una
persona más alta que sus discípulos. delgado. Con cabello
castaño largo y suave. piel blanca y ojos claros. Aunque esta imagen
nos resulta familiar. es errónea. Una persona con esas características
físicas habría sido muy diferente de los habitantes de la
región donde Jesús vivió y predicó. Es seguro
que los autores de los Evangelios habrían mencionado dicho contraste.
Al contrario. de acuerdo con el Evangelio según San Mateo, cuando
Jesús fue arrestado en el huerto de Getsemaní antes de la
crucifixión. Judas Iscariote tuvo que indicarle a los soldados quién
era Jesús porque no podían distinguirlo. Lo que convierte
a la apariencia de Jesús en un misterio todavía mayor es que
no se le describe en el Nuevo Testamento ni se han encontrado retratos suyos.
Existe el problema adicional de no contar con un esqueleto ni con otro tipo
de restos que servirían para rastrear ADN. Ante tal falta de evidencia.
nuestras imágenes de Jesús son producto de la imaginación
de los artistas. La influencia de las culturas y tradiciones de dichos artistas
puede ser profunda. opina Carlos F. CardozaOrlandi, profesor de cristiandad
mundial en el Seminario Teológico de Columbia, Atlanta. "A pesar
de que predominan las imágenes de tipo occidental, en otras áreas
del mundo suele representársele como negroide, árabe o hispano."Así
que la pregunta permanece: ¿Cómo era Jesús?
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grande y claro
Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 55 - Diciembre
2002 - Número 12
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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus