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Una Casa de Magia - Noviembre 1954
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En la nueva casa de Jack Fletcher,
las ventanas se cierran por sí solas en cuanto el viento sopla
con fuerza por más de 15 segundos . También se cierran
automáticamente cuando comienza un aguacero o cuando la
temperatura del exterior desciende a tal punto que puede ser
incómoda. En la sala de Fletcher no hay temor de que los
invitados tropiecen con los alambres de las lámparas de
pedestal. Las lámparas de pedestal en esta "Casa del Siglo XXI"
no tienen cordones eléctricos. Los tubos fluorescentes
podrían, incluso, estar quemados, y aun así dar luz
perfectamente al ponerlos en ciertas partes de la sala.
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Fuente: Revista Mecánica
Popular - Volumen 15 - Noviembre 1954 - Número 5 |
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