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La decisión no es fácil ante una interrogante que desde
hace un tiempo a la fecha se ha agigantado en la mente de casi todos los
filatelistas, de los que ahora comienzan, alcanzando también a muchos
que por años han venido coleccionando sellos en general.
Cada vez se hace más difícil
coleccionar sellos de todo el mundo (yo sigo recomendando tener una colección
de sellos de todo el mundo), y muchos han optado por coleccionar una región
o un solo país. También he notado que algunos filatelistas
coleccionan un país y una temática, pero lo que por lo general
se ve es a coleccionistas que sólo se dedican a coleccionar un país
o una temática y de ahí nunca salen, aunque se les hable maravillas
de otros países o temáticas. El viejo refrán nos dice:
"Quien mucho abarca poco aprieta", y quizás esto sea valedero
para los que quieren tener una colección fuerte y especializada en
algo que al concursar les conquiste premios, deseos muy humanos y contra
los cuales no tenemos ninguna condena, pero en honor a la filosofía
de los que coleccionamos desde hace muchos años atrás, siguiendo
las pautas trazadas por los que nos enseñaron a coleccionar sellos,
la filatelia debe ser practicada por los que desean tener un entretenimiento
sano, que pueden practicarlo a toda hora del día o la noche en la
quietud del hogar, un entretenimiento que les reporta horas de disfrute,
mientras aprenden historia, geografía, artes y otras disciplinas,
un entretenimiento sin ánimo de lucro, de preseas ni de demostrar
a los demás que tenemos más que ellos.
Jamás me atrevería a negar la belleza y el atractivo que tiene
una colección temática. He tenido visitantes que me han demostrado
parte de sus colecciones con las cuales me he quedado maravillado (viendo
sólo una parte), y estando de visita en casa de un amigo filatelista
he aprendido tanto acerca de un tema coleccionado por él, que luego
he tenido que venir y escribir sobre el mismo para compartirlo con ustedes,
en honor y merecimiento de este coleccionista tan dedicado.
El coleccionismo de sellos dedicados a una región geográfica
o a un país específico, aunque sea el país más
pequeño y humilde del mundo, siempre sirve para mostrarnos su historia
y patrimonio cultural. Cuando visito un país, aunque ya tenga conocimientos
generales sobre el mismo, al charlar y ver la colección de un filatelista
amigo comienzan a surgir datos y referencias que nos sumen por horas hablando
de su colección, de cómo comenzó el correo organizado
y si existían correos primitivos, de las marcas y matasellos que
se han utilizado, de los errores y variedades que ha encontrado en los sellos,
de los dueños o poseedores anteriores de una pieza que ahora tiene
en su colección, de los motivos ignorados que produjeron un sello,
de mil y una historia que ha podido conocer mediante su colección
de sellos. La elección
es suya, coleccione una temática o un país, coleccione ambos
o sea más amplio coleccionando sellos de todo el mundo. Eso sí,
estudie sus sellos, el motivo que los creó, qué significan,
y así no importa lo que coleccione, temas o paisajes, disfrutará
de sus sellos. |
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Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 45 - Enero
1992 - Número 1 |
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