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Cofre "Misterioso" |
Por Walter E. Burton |
ESTE PEQUEÑO COFRE no sólo proporciona espacio
para guardar joyas, artículos de escritorio y materiales de costura,
sino que la singular disposición de sus gavetas constituye un elemento
de misterio. Aunque aparentemente posee 16 gavetas, sólo cuatro son
reales, una en cada lado, como se indica en la foto de arriba. A pesar de
que el mueble que se ilustra consta de dos secciones o filas de gavetas,
se pueden añadir otras adicionales con gran facilidad, ya que cada
fila es de construcción idéntica. Las nuevas secciones de
gavetas pueden agregarse aun después que el cofre está terminado
y colocado en el lugar que se va a usar, siempre que la parte superior se
haya fijado con clavos solamente. La labor de encolarlo debe dejarse hasta
que se decida no añadir más gavetas. Las gavetas en cada sección
se extienden a toda la profundidad del cofre. En el mueble que se muestra,
las secciones están combinadas de manera que las gavetas de un lado
se deslizan en ángulo recto con las del otro. Si se desea, las gavetas
pueden colocarse en una forma en que todas las verdaderas se abran en el
mismo lado, o también es posible disponerlas para que se abran desde
dos lados opuestos.
Las piezas del conjunto pueden hacerse de pino blanco y de nogal, como se
sugiere en el dibujo que aparece en la página siguiente, o es posible
usar cualquier otra combinación de maderas apropiadas para cofres.
A fin de reducir los gastos, debe emplearse' el material de enchape en todas
las piezas, salvo en los postes de las esquinas y de la parte superior.
El fondo de las gavetas se hace de fibra prensada de 1/8". Todas las
juntas se encolan y se clavan. El tirador que se muestra se hizo de tubo
de latón, aunque también puede usarse uno de puerta de cómoda
o de ventana. |
Los postes y la pieza embutida en los lados de las falsas
gavetas se encolan antes de armar el mueble |
La pieza lateral y la del extremo se encolan y se clavan
en el borde encolado a los cantos del fondo |
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Clic en la imagen para ver más grande y claro |
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Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 26 - Abril
1960 - Número 4 |
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