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No se fíe Nunca de una Sierra Circular |
Por Sam Brown |
EL OPERARIO que se acostumbra a vigilar constantemente
sus acciones y las de la sierra circular mientras trabaja en ella, raramente
sufre alguna lesión seria. Casi nunca puede culparse al funcionamiento
mecánico de la sierra cuando se produce un accidente. Es ese instante
de distracción suya, mientras maneja la sierra, el que puede costarle
la pérdida de un dedo o una lesión menos grave pero aun sumamente
dolorosa. La mayoría de las operaciones corrientes son tan simples
y el trabajo se efectúa con tanta rapidez y facilidad, que a menudo
el operador tiende a descuidar en algo las precauciones ordinarias. Algunos
conocimientos básicos eliminarán o reducirán en gran
parte los riesgos que encierran las operaciones más complejas, como
el cortar molduras y piezas a determinado ángulo. Los últimos
modelos de sierras están equipados con guardas protectoras que cubren
por completo la hoja de la sierra durante casi todas las operaciones más
corrientes, como en tos cortes longitudinales (divisiones), o los cortes
transversales. |
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grande y claro |
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Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 5 - Agosto
1949 - Número 2 |
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