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Calor y frescura -Catamarán Virage 240
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| Por Cliff Gromer |
Acelerar el catamarán
Virage 240 provoca un sonido sordo pero identificable que es como
música para los oídos de los aficionados a la
navegación. El sonido se disuelve en el viento, mientras mi
compañero aumenta la velocidad a 136 km/h. La palabra
“emocionante” no de define con completo lo que
siento. Saboreo la velocidad, el viento y el sonido durante el tiempo
que considero prudente. Pocos motores provocan la misma
sensación que genera un supercomprimido.
Los motores supercomprimidos no son nuevos en el mercado de los botes
deportivos. Se han considerado como el equivalente marino de los
esteroides durante años. Pero ahora las empresas Livorsi
Marine. Nisonger Marine y Arizona Spped & Marine quieren
elevarlos aun nuevo rango al convertir a su Wynjammer en lo
más fresco de la temporada, tanto en diseño como
en temperatura.
A grandes rasgos, los motores supercomprimidos comprimen aire y lo
empujan, junto con combustible adicional, al interior de la
cámara de combustión. La mezcla resultante de
aire/combustible es más densa y presiona más los
cilindros cuando se enciende -de ahí que aumente la
potencia. Sólo tiene un inconveniente: el aire comprimido
genera calor, el cual afecta el sistema que se ocupa de las
detonaciones periódicas del motor, Para eliminar dicho
inconveniente, algunos fabricantes integran un sistema de enfriamiento
interno a la inducción. Éste trabaja como un
radiador en miniatura enfriado por aire o agua, pero aunque es muy
eficiente, aumenta el peso del motor y reduce la potencia disponible.
Las unidades Wynjammer, en cambio, son tan frescas que no requieren de
un sistema de enfriamiento interno.
El Wynjammer supercomprimido es un motor de tipo centrífugo
que recurre a menos de 15 hp para producir 6 psi de impulso. Al Martin,
diseñador del Wynjammer, ataca el problema del calor justo
en su origen: además de operar a pocas revoluciones por
minuto, el supercomprimido cuenta con una distribución del
sistema de compresión que produce menos calor que los
diseños convencionales. El propulsor está
fabricado con aluminio forjado -especialmente tratado-, y emplea
pequeñas aspas que atraen mucho aire y lo liberan con la
misma rapidez. El diseño del motor reduce considerablemente
las necesidades de potencia y produce una descarga
instantánea que aumenta la potencia total casi sin
incrementar la temperatura del aire.
La mayoría de los motores supercomprimidos dependen de una
unidad para administración de combustible, que es
pequeña computadora auxiliar que indica a la computadora
principal cuándo debe aumentar la presión del
combustible en condiciones de aceleración. Wynjammer
prefirió reprogramar el sistema de administración
de la computadora principal para que cumpla directamente con los nuevos
requisitos de encendido y aire/combustible del motor. El Wynjammer
tampoco necesita lubricación interna, lo cual elimina la
presencia de aceite en el interior del motor -y las temperaturas que
alcanza el aceite durante la aceleración, que
también generan una fuente no deseada de calor.
El Wynjammer se ofrece como un estuche diseñado para motores
de botes de inyección por combustible de 502, 454 y 350
pulgadas cúbicas. Cada estuche cuenta con todo lo que
necesitaría para instalar. Incluyendo una bomba de
combustible, un regulador de presión y las abrazaderas
necesarias. Cualquier persona sin experiencia mecánica puede
instalarlo en tres horas. El sistema de supercompresores gemelos se
vende por U.S. $6,495, mientras que uno solo cuesta U.S.$2,995. Si le
interesa, puede encontrar más información en las
siguientes páginas de Red: www.nisongermarine.com y
www.livorsi.com. |
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| Fuente: Revista Mecánica
Popular - Volumen 52 - Enero 1999 - Número 1 |
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