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El bote del futuro
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Le expusimos
nuestras ideas a un experto diseñador para crear la nueva
generación de botes del Siglo XXI |
Por Joe Skorupa |
Ilustración:
Granata Design |
El bote del
futuro se moverá a impulsos de un motor de dos ciclos con
mando en la popa que después de cruzar dejará el
agua más limpia que antes. Un depurador de agua
será acoplado al sistema de enfriamiento y
filtrará los contaminantes, para de esta forma ayudar a
balancear el escape a través de los conductos de salidas. El
motor, aunque no será mayor de 0,05 m3 (2 pies3),
tendrá suficiente torsión ara darle
propulsión a un bote de 7 m (23 pies) de modo que desarrolle
velocidades para halar a los esquiadores. Y será silencioso,
totalmente eficiente y estará equipado con una
conexión telefónica para poder enviar la
información de diagnóstico a un taller de
servicio, a través del teléfono celular a bordo.
Además de los transductores ubicados en la proa y la popa
para obtener lecturas múltiples de profundidades, el bote
estará equipado con un sonar dirigido hacia adelante. Los
objetos que se aproximen de frente aparecerán en la pantalla
del tablero de instrumentos.
Habrá altavoces parabólicos localizados en arcos
sobre la altura de la cabeza, para crear una jaula
estereofónica en el asiento de banco de la popa. Los
adelantos en la radio le permitirán al sistema transferir
frecuencias que cancelan los ruidos externos.
El parabrisas curvado estará abisagrado y será
retráctil: la posición hacia abajo
será para tener visibilidad en las actividades deportivas y
la posición hacia arriba es la que brinda
protección. Una cubierta telescópica para la
lluvia estará escondida En el tablero de instrumentos.
Diseño de la
década 1990
En un campo en donde casi todo es posible, me he sentido frustrado de
que la industria aparentemente tenga una mentalidad de copiar lo
existente. Hace un año conocí a Peter Granata, un
diseñador de botes de Hilton Head, Carolina del Norte, y
descubrí que compartía mi manera de sentir. Luego
de habernos reunido posteriormente varias veces, nos hicimos el
propósito de hacer algo sobre aquello. Así,
decidimos diseñar el bote de Mecánica Popular
para la década de 1990.
Así que procedimos a establecer los parámetros,
basándonos en los análisis actuales del mercado y
en sus proyecciones. Concluimos que nuestro bote debía ser
un crucero diurno remolcable. El diseño fue enfocado para
sacarle provecho a dos proyecciones sobre las tendencias
demográficas: 1) La constante migración hacia las
regiones costeras; 2) La madurez de las familias pertenecientes a la
generación de la explosión
demográfica. Otras fuerzas del mercado se concentran en: la
preocupación ambiental, las aplicaciones de las
microprocesadoras y la fascinación con la
instrumentalización.
¿Qué otros elementos caracterizarán al
bote de MP del futuro? En su diseño se combinan las mejores
características de la consola central, cubierta en la proa y
una cabina. La posición del piloto se encuentra en el eje
central y tiene una estación de navegación a
estribor. El tablero de instrumentos le brinda una gran amplitud de
espacio para instrumentos electrónicos, como una pantalla de
sonar múltiple y una computadora plegable con capacidades
Iorán y GPS (vía satélite).
Proyectándose al frente del timón
estará la cabina. Detrás del asiento de banco de
la popa hay un área de almacenamiento de dis noveles, con un
remolcador de esquís que se retrae. Los cojines para el sol
en la popa están hechos de un material de rápido
secamiento, para que puedan ser usados como balsas para flotar.
Finalmente, las capas del casco serán rellenadas con un
núcleo de la espuma de vidrio reciclada de botes viejos.
Según Granata, pocos botes son diseñados de esta
manera. Por lo general el constructor llama a un diseñador y
le pregunta qué es lo que tiene. Hicimos este bote
analizando las tendencias demográficas, los estilos de vida
y los adelantos de ingeniería. El tiempo
confirmará si estuvimos acertados. |
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Fuente: Revista Mecánica
Popular - Volumen 43 - Noviembre 1990 - Número 11 |
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