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Navegación: Cobalt Condurre 223
En nuestra prueba de larga duración encontramos que este esbelto y rápido crucero deportivo se destaca también por su alta calidad.
Por Joe Skorupa
Fotos MP: Humphrey Sutton
Puede decirse que los botes que produce la firma Cobalt, establecida en Neodesha Kansas, son embarcaciones superdotadas. El verano pasado tuve el gran placer de probar un modelo deportivo Cobalt Condurre 223. Lo tuve en mis manos durante seis semanas y lo usé en las aguas del lago George, el lago Greenwood y la Bahía Great South de Long Island, todos ellos en el estado de Nueva York.

Quedé muy interesado en el Condurre de 6,70 (22') desde la prueba comparativa de botes de tumbadillo deportivos de MP (vea nuestra edición correspondiente al mes de enero del año 1990). Entre un grupo de cinco botes similares, todos de marcas conocidas, el Condurre ocupó el primer lugar en todas las categorías de rendimiento, además de la categoría de ajuste y acabado. A todo esto hay que añadir que superó de sobra a todas las otras embarcaciones, estableciéndose como la mejor de todas ellas.

Quería averiguar más sobre este bote y sobre la compañía que lo construyó o lo superdotó. He aquí lo que verifiqué.

Puesto de vanguardia
Condurre es una palabra italiana que significa "ecabezar", por lo que resulta adecuada para un bote que se encuentra a la vanguardia de las otras embarcaciones con las cuales compite. La Cobalt comenzó la línea Condurre, diseñada por Peter Granata, de Hilton Head, South Carolina, en el año de 1986. Nadie puede dudar que el 223 es un bote de gran estilo. Tiene un parabrisas envolvente e inclinado, un yugo de popa invertido con una plataforma de natación integrante, atractivas guarniciones de madera de teca, asientos con una tapicería de alta calidad, colores suaves y un acabado liso y lustroso. Pero, ¿por qué atribuirle el calificativo "superdotado" al Condurre)?.

La atención que se le presta a los pequeños detalles es lo que separa a los botes producidos en grandes cantidades de los botes producidos en cantidades limitadas.

Considérese la compleja geometría del área del yugo de popa, con sus líneas y sus rebajos moldeados, Se trata de un estilo que rara vez brindan los botes comunes y corrientes, ya que tarda tiempo en la fábrica el proporcionarle formas especiales a la fibra de vidrio y tarda aún más tiempo el secamiento del casco en los moldes.

De hecho los moldes del casco y la cubierta se limpian y se enceran después de cada uso que se les da. Se comprueba su uniformidad y se pulen a mano después de producir cada 10 botes.

Cada bote permanece en el molde para curarse durante tres a cuatro días, un período de tiempo largo si se considera que muchos botes de este tamaño se terminan totalmente durante el mismo período de tiempo. Este cuidado y atención a la calidad durante el procedimiento de laminado produce el lujoso acabado que muestran los productos Cobalt. características éstas que los singulariza.

Se requieren 12 días para construir un modelo Cobalt, o sea el doble del tiempo que tardan los botes de tamaño comparable de otros fabricantes.

Pruebas en el agua
Aunque nunca conduje el Condurre en aguas agitadas mar afuera, si lo sometí al impacto de vientos lo suficientemente fuertes y olas lo suficientemente grandes para darme cuenta de su resistencia y además de su gran estabilidad. La durísima pared de su casco da la sensación que puede resistir las condiciones mȧs difíciles de navegación sin que se alteren sus características marineras.

Pude comprobar que el bote desarrolla una alta velocidad. Tenia un motor Mercuy de bloque grande, con un desplazamiento de 7439 cm3 (454 pulg. cub.), un carburador de cuatro cañones y un mando vertical Bravo One de alto rendimiento. El Mercury de 7,4 litros desarrolló una potencia de 330 hp y la torsión suficiente para que el Condurre navegara a 92,3 km/h (57,4 mph) a través de aguas tranquilas.

Una de las razones del extraordinario rendimiento del Condurre es su casco de fondo en V de 20°, el cual atraviesa las olas sin ningún problema, avanza en línea recta y efectúa virajes como si fuera un automóvil. Por mȧs que me esforcé por descubrir alguna falla en el comportamiento del casco al navegar, el Condurre se comportȯ con insuperable eficiencia.

Importancia de la hélice
El verano pasado pude comprobar de nuevo lo importante que puede ser la hélice para el suministro de la fuerza. Después de recoger el Condurre en el atracadero Marineland a orillas del lago Greenwood, donde acondicionaron el bote a la perfección, quedė decepcionado por el rendimiento de la embarcación. Apenas seis meses antes había probado un modelo de 1988. con un casco y un motor idénticos, y el bote logrȯ planear con rapidez y sin ningún problema.

Este modelo de 1989 aceleró con la proa en lo alto y no efectuaba virajes de la manera debida. Mostró una tendencia a dejar de planear al efectuar virajes pronunciados y también a planear con retardo de nuevo, a no ser que lo detuviera.

Llamė a un amigo en la Cobalt y le conté lo que me estaba sucediendo. Me contestó él: "El bote que usted condujo el año pasado tenia una hélice de acero inoxidable con un paso de 58,42 cm (23"). El bote que tiene ahora tiene una hélice de aluminio de norma de 58.42 cm (232), que es la que instalamos en los botes que remitimos a nuestros clientes."

Después de instalar una nueva hélice, volvió el bote a actuar como un verdadero campeón. El Condurre mostraba ahora su familiar forma de acelerar desde la inmovilidad con la proa hacia abajo con la hélice impulsándolo correctamente durante todos los virajes.

Remolqué el bote a lo largo de un recorrido de varios cientos de kilómetros entre los dos lagos y la bahía donde probé el Condurre el verano pasado. Este recorrido a lo largo de autopistas de alta velocidad y también por calles de ciudades se efectuó con cuatro excelentes vehículos de remolque Ford -el Bronco ll. el Bronco de tamaño grande, el Aerostar y la Ranchera Econoline Club.

No obstante la pesada carga, casi el limite de 226,8 kg (5000 libras), los vehículos remolcadores no experimentaron ningún problema en las rampas de botadura o las inclinadas pendientes que recorrieron. Aunque todos los vehículos cumplieron su cometido a la perfección, mis modelos favoritos fueron la minifurgoneta Aerostar con su motor V6 de 3.O litros y el Bronco de tamaño grande, equipado con un motor V8 de 5,O litros y un sistema de tracción en las cuatro ruedas. Los dos vehículos se encuentran equipados con el lujoso conjunto Eddie Bauer.

Tal como mencionamos antes, el Condurre es un bote de gran estilo y de máxima calidad. Entre sus características sobresalientes se encuentran una tapa hidráulica para la escotilla del motor, un tablero de instrumentos de metal anodizado negro con los instrumentos bien agrupados y una inmensa plataforma para baños de sol. El cómodo tumbadillo, aunque pequeño, estȧ totalmente alfombrado y tiene una litera de tipo V, un bar y dos escotillas de ventilación.

Es posible que pudiera quejarme de algunas cosas. Por ejemplo, por mantener plana la cubierta delantera con objeto de proporcionarle un perfil deportivo a la embarcación, el área del tumbadillo carece de suficiente espacio. Aunque el espacio de almacenamiento es aceptable, con un total de O,97 m3 (34,45 pies3), algunos botes de este mismo tamaño tienen una capacidad casi dos veces mayor. Y, finalmente, la borda, que fluye suavemente dentro del parabrisas, es tan alta que resulta algo problemático entrar y salir de la embarcación.

Varias personas que conocí el verano pasado comentaron que los botes Cobalt Condurre son los "Cadillac de su clase". Parte de esta reputación se debe a lo que he calificado como "superdotado". Como es natural, esta atención a los detalles cuesta un poco mȧs de dinero (US$31 457 para el Cobalt Condurre 223 con un motor Mercury de 7,4 litros), pero el resultado final es un casco y una cubierta con una garantía transferible de cinco ańos y una garantía de dos ańos para visualmente todo el resto.

Dice así el disenador industrial Peter Granata: "Nadie puede decir que una obra de arte está superdotada. Se puede decir que un producto está superdotado, pero no una obra de arte. No considero al Cobalt Condurre como un producto. Es algo más".
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Navegación: Cobalt Condurre 223 - Febrero 1990 Navegación: Cobalt Condurre 223 - Febrero 1990

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 43 - Febrero 1990 - Número 2


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Idea original de Mi Mecánica Popular por: Ricardo Cabrera Oettinghaus