Automovilismo - LA INDUSTRIA DEL AUTOMOVIL EN ARGENTINA

LA INDUSTRIA DEL AUTOMOVIL EN ARGENTINA

En 1959, Chrysler International S. A. -subsidiaria de Chrysler Corporation, de Detroit, EE. UU.- unió sus recursos financieros y técnidos con los de Fevre y Basser, antigua firma argentina del ramo automotor. Nació así Chrysler Argentina que, con un gran aporte en moderna maquinaria y equipos, inició sus operaciones en las instalaciones que poseía Fevre y Basset

VISTA AEREA del complejo automotriz de San Justo (Buenos Aires), donde se fabrican, Por Chrysler Argentina y Fevre & Basset, los automóviles Valiant y los camiones y pickups Dodge, Fargo y De Soto. La foto muestra el conjunto de plantas modernas. Al fondo se ve la pista de pruebas

ESTAS INVERSIONES, sumadas a las diversas ampliaciones y modernizaciones que se sucedieron en los seis años a la fecha -representadas por las plantas de estampado, motores, transmisión, montaje y por otras importantes dependencias complementarias y auxiliares- constituyen lo que es hoy el impresionante complejo automotriz de San Justo (Buenos Aires) , de 62.150 metros cuadrados cubiertos, levantado sobre un predio de 38 hectáreas, y que ocupa un personal de 2420 obreros y empleados.
Desde 1960, año en que comenzó la fabricación, hasta el 30 de septiembre de 1965, fueron producidos 52.806 vehículos, entre automóviles modelos Valiant y camiones y pickups Dodge, Fargo y De Soto, clasificados en 21.773 coches de pasajeros y 31.033 unidades de carga. Una producción ya satisfactoria.
El constante crecimiento de ambas empresas asociadas queda reflejado en estas cifras: durante 1960, el monto de las ventas fue de 1.630.958.000 pesos, cantidad que se elevó en 1964 a 9.525.620.359 pesos. En cuanto a las inversiones en activo fijo, eran de 3000 millones de pesos al 31 de diciembre de 1964; el capital suscripto y realizado a esa misma fecha ascendía a más de dos mil cien millones de pesos (pesos argentinos).
Planta de Estampado: Esta planta, en la que se fabrican las partes que integran las carrocerías y cabinas, consta de 77 prensas y máquinas auxiliares, ubicadas en un pabellón de 5872 metros cuadrados. Las grandes prensas, de 250 a 750 toneladas, funcionan en cuatro líneas paralelas, aun ritmo de 5 a 15 golpes por minuto. Las prensas menores, a balancines, son de 75 a 110 toneladas, a 40 golpes por minuto. Las operaciones básicas que se realizan en esta planta son las de preparación, corte y prensado.
Planta de Motores: Proveedores locales suministran la materia prima, fundida o forjada, que luego se mecaniza en la planta -instalada en una superficie cubierta de 6500 metros cuadrados- donde se producen en serie los blocks de cilindros, cigüeñales, árboles de levas, tapas de cilindros, volantes, cubrevolantes, bielas, bombas de aceite y de agua, múltiples de admisión y escape y demás elementos que componen los cuatro modelos de motores que equipan la línea de vehículos Chrysler de la Argentina.
Operan 221 máquinas semiautomáticas, en su mayoría de mandos electrohidráulicos, y tres balanceadores electrónicos que aseguran el equilibrio dinámico de los cigüeñales. Entre el instrumental de control y detección de fallas, se cuentan dispositivos electrónicos de coordenadas, equipo magnético para señalamiento de fisuras y calibres de columna de aire.

ASPECTO GENERAL de la sección final de montaje. La foto muestra coches de pasajeros Valiant recibiendo el último repaso a fin de que no les falte nada. Una operación igual se lleva a cabo con los camiones y pickups que se producen en las plantas Chrysler de San Justo. Es una industria creciente

Planta de Transmisión: Siete modelos de cajas de velocidad de tres y cuatro marchas, que llenan las necesidades propias del complejo y de otras industrias automotrices, son fabricadas en esta planta, que mide 4309 metros cuadrados. Funcionan en ella 240 máquinas-herramientas. En un horno continuo automático -único en el país- son tratadas térmicamente 42 diferentes partes previamente labradas. Las operaciones requeridas son 700 y se hacen con 2000 tipos de herramientas.
Los equipos empleados consisten en tornos automáticos de 8 husillos, laminadoras de dientes, brochadoras y alesadoras múltiples, una de las cuales desarrolla las tareas de un conjunto de once máquinas-herramientas comunes. La acción es completada por un laboratorio que vigila el proceso térmico mediante análisis micrográficos. Los controles de manufactura son severísimos.
Planta de Montaje: Armado de carrocerías y cabinas, pintura, tapizado e instalaciones varias, completado del vehículo y prueba final son las cinco operaciones básicas que se cumplen en la planta de montaje. Trabajan en ella 550 obreros bajo la fiscalización de cuarenta supervisores y capataces.
En el armado se usa el sistema "Gate Line" (Línea de Bastidores) , que facilita la labor y que fue construido enteramente por argentinos. Permite el ensamblado en serie y su rendimiento está calculado para 10 unidades por hora. Sesenta máquinas eléctricas, colgantes, con capacidad promedio de 75/100 kw. realizan la soldadura a punto. Las carrocerías son movilizadas por una cadena transportadora para su sellado y colocación de puertas y guardabarros. Por otras razones obvias, las diversas etapas del montaje requieren un espacio sustancialmente mayor, por lo que esta planta ocupa 18.645 metros cuadrados de superficie cubierta.
La inspección previa a la pintura incluye la fosfatización automática de las carrocerías, la aplicación de antióxido, laca o esmalte acrilico y epóxico -lo más reciente en materiales para anclaje de pintura-el horneado y la protección de la parte inferior con goma asfáltica, aplicada a soplete. Con el pulido posterior, se logra la terminación perfecta, característica en la presentación de los productos Chrysler.
Con igual celo, expertos obreros realizan los demás múltiples trabajos., que comprenden desde la colocación del panel de instrumentos, instalación de faros y luces, tapizado de la unidad, colocación de la suspensión, cañerías, tanque de combustible y paragolpes, montaje del conjunto sobre los ejes y el motor, alineación de la dirección y otros ajustes finales, hasta su sometimiento al riguroso "road test" (examen de ruta) sobre pista de prueba, como último requisito para merecer el sello de garantía que distingue la marca Chrysler.
Otras instalaciones básicas: Entre las numerosas dependencias, departamentos y secciones que mantienen en constante actividad las diferentes instalaciones fabriles y que, en una u otra forma, están estrechamente ligadas con las operaciones de las cuatro plantas principales, se cuentan el taller de herramientas, la sección de expedición, los almacenes generales, el laboratorio y la usina.

LOS BLOQUES de cilindros de los motores pasan aquí a lo que se denomina "maquinado". Obreros especializados vigilan y accionan los aparatos que limpian y pulen las piezas que por allí pasan a fin de ponerlas en condiciones de seguir a los sucesivos departamentos del proceso industrial

LA PLANTA DE TRANSMISIONES tiene extraordinaria responsabilidad. En la Chrysler de San Justo se fabrican cajas de velocidades de tres y cuatro marchas. En la fotografía puede verse parte de la labor que se desarrolla en la línea de montaje, antes de situar las transmisiones

El taller de herramientas funciona en un pabellón de 700 metros cuadrados. El servicio principal que presta es el mantenimiento en perfecto estado de las herramientas, como así también la fabricación de aquellas que no es posible obtener en plaza. Veinticinco máquinas especiales efectúan el afilado y otras veinte se encargan de la fabricación de herramientas, bajo severa inspección con instrumental y equipos de alta precisión. En la sección de expedición se someten los vehículos al último control y se les dota de las tazas de ruedas, herramientas y encendedores. Dado el visto bueno, las unidades se despachan a los concesionarios, desde el amplio y moderno pabellón que ocupa esta sección, de 1516 metros cuadrados. Los almacenes generales, que albergan los materiales productivos y no productivos, dan cabida a más de 12.000 piezas, conjuntos y subconjuntos. Montada para un ágil movimiento y manipulación de materiales, se reciben en esta sección 60.000 partidas anuales procedentes de la industria local, las que se analizan a fondo antes de su aceptación. Para este fin se utilizan detectores de fisuras, computadoras electrónicas con apreciaciones hasta 1/25 millonésimo de pulgada y otros aparatos de gran precisión.
	PRENSAS DE ESTAMPADO donde tomaron forma las carrocerías que se agregarán luego en otros departamentos a las partes básicas del automóvil a fin de formar el vehículo completo y perfecto
Los laboratorios, en la organización Chrysler, son virtualmente los guardianes de los altos standards de calidad que respaldan su imagen en el mundo entero. En el complejo de San Justo, la investigación científica y tecnológica se cumple en un edificio de 1.067 metros cuadrados y equipado con la última palabra en materia de instrumental, en el que actúan 44 profesionales argentinos. Está dividido en cuatro secciones: ensayos físicos y análisis de materiales no metálicos; laboratorio metalográfico; laboratorio químico, y laboratorio funcional. En cada una de estás secciones se desarrollan los más exigentes procedimientos de ensayo, sometiéndose a los materiales apruebas muy superiores a las que habrán de soportar en el uso normal. La usina propia es un auxiliar de extrema importancia para el normal e ininterrumpido funcionamiento de las plantas que componen el complejo, dado que complementa el suministro de energía eléctrica entregado por el servicio público. Cuenta con dos motores diesel "Deutz" de 1.500 HP a 500 rpm. acoplados a alternadores AEG de 1250 kva cada uno, a una tensión de 380 voltios, 50 ciclos, con excitatriz también acoplada directamente. Para las herramientas neumáticas se emplean dos autocompresores de aire "Ingersoll-Rand", de 110 libras de presión, que proporcionan 975 pies cúbicos por minuto. El edificio de la usina mide 531 metros cuadrados.
Otra de las dependencias que, por la actividad que desarrolla y servicio que presta, merece ser destacada entre las más importantes instalaciones, es el departamento de repuestos. Se halla en un depósito de hormigón armado de 41.26 metros cuadrados, independiente de las demás plantas de producción, que comprende administración, recepción, venta y despacho a los concesionarios. Mediante un eficaz sistema de estanterías metálicas, divididas en sectores y calles, los repuestos y accesorios son localizados, renovados y despachados rápidamente. Más de 15.000 piezas, de las más diversas clases, constituyen el término medio de las exigencias permanentes atendidas por este servicio. Eficiente Organización Administrativa: Resultaría superfluo enumerar las varias divisiones, departamentos y secciones que componen el actual organograma de las empresas asociadas y bajo cuya dirección opera el complejo automotriz de San Justo. Cabe, sin embargo, destacar que la eficiente administración en todos sus órdenes, está compartida por numerosos directivos de alto rango, cuyos antecedentes y experiencia no sólo emanan de largos años de actuación en el campo de la industria automotriz, sino también de su capacitación técnica y desempeño en esferas centrales de la organización mundial Chrysler. Al frente de este experto equipo de nivel ejecutivo se halla el señor Fred Luss, vicepresidente y director general de Chrysler Argentina y Fevre &, Basset. Hombre de vasta experiencia en la moderna técnica empresaria del ramo, tócale al señor Luss no sólo la satisfacción de haber participado activamente en el logro del prospero estado actual de las empresas Chysler, sino también la responsabilidad, compartida con su plantel de colaboradores, de mantener el alto grado de organización administrativa en una línea de continuo ascenso y progreso para la organización Chrysler en la Argentina.

Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 38 - Abril 1966 - Número 4