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Autos Personales: Veloces, Elegantes y Deportivos - Enero 1969
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Cierto escritor norteamericano dijo
en una ocasión que cuando un hombre compra un auto, hace una
declaración pública sobre su persona.
Y esto bien puede aplicarse al caso de los nuevos autos "personales"
que constituyen algo así como blasones que identifican a sus
dueños como personas pertenecientes a un rango especial de gente
avanzada.
Puede ser cierto o no, pero lo que no se puede negar es que han
constituido un gran éxito desde su aparición, tanto en lo
que respecta a los modelos sencillos como a las versiones de lujo, ya
sus ventas representan un 25 por ciento del mercado total
norteamericano.
Años atrás, los únicos autos que podían ser
considerados como coches personales eran tales vehículos
deportivos como el Mustang, el Camaro y otros semejantes. Pero si
presta usted atención a los anuncios publicitarios,
notará que al Buick Riviera, por ejemplo, lo describen en
términos muy semejantes al Javelin de la American Motors, por
ejemplo. Ambos se venden con la promesa de que si invierte usted dinero
en un auto de este tipo, de inmediato se le abrirán las puertas
del paraíso y del triunfo social.
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Fuente: Revista Mecánica
Popular - Volumen 45 - Enero 1969 - Número 1 |
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