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Manejando el convertible K de la Chrysler - Mayo 1982
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Tenía que suceder. Detroit no
podía permitir que todos esos talleres especializados en
carrocerías, agencias de autos, talleres fabricantes de autos
especiales y otras firmas monopolizaran el negocio. ¿Qué
negocio? En caso de que no lo haya notado, la hechura de convertibles
se ha transformado en un gran negocio durante los últimos cuatro
años. Todo comenzó cuando ciertos talleres de
carrocerías se dedicaron a recortar los techos de algunos autos
de tipo deportivo más populares que había: Camaro,
Firebird, Mustang, Toyota, etc. Tan bueno se ha vuelto el negocio que
las agencias de automóviles en casi todas las principales
ciudades norteamericanas han instalado cerca de sus locales un taller
para transformar autos convencionales en modelos convertibles.
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Fuente: Revista Mecánica
Popular - Volumen 35 - Mayo 1982 - Número 5 |
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