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El Corvette - Abril 1956
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| El que maneje un Corvette 1956 no tiene por
qué preocuparse de los aguaceros. Apenas comience a lloviznar,
todo lo que hace es oprimir un botón para hacer que la capota de
funcionamiento motriz salga de su receptáculo en la parte
posterior. Oprimiendo otro botón, suben las ventanillas del
coche, convirtiendo a éste en un vehículo que ofrece
tanta protección contra la intemperie como un sedán.
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| Fuente: Revista Mecánica Popular -
Volumen 18 - Abril 1956 - Número 4 |
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