1. Investigaciones. Los satélites se equiparán con otros instrumentos para estudiar la radiación, las trayectorias de las minúsculas partículas de polvo, los átomos errantes y la luz solar. Además, permitirán descubrir nuevas zonas de radiación.

2. Regulación del tiempo. Con los datos sobre la formación de las nubes proporcionados por los satélites, podrá conocerse con varias semanas de anticipación el movimiento de grandes conjuntos de nubes. Esto constituye un pronóstico del tiempo. El control del tiempo vendrá después: Los satélites tal vez despidan grandes cantidades de substancias químicas que dividirán las nubes que se aproximen.

3. Sistema retransmisores de TV, de radio y telefónicos. Ya están en vías de ejecución algunos planes para utilizar los satélites como retransmisores en varias formas. En uno de ellos, tres satélites espaciados 120 grados entre sí, giran alrededor .de la Tierra recibiendo señales de ésta y emitiéndolas a cada uno de los satélites del grupo, para retransmitirlas ala Tierra a su debido tiempo. En un plan más avanzado, se1anzan tres satélites que describan alrededor de la Tierra una órbita ecuatorial de 35.887 kilómetros de altura, a una velocidad de 11.265 kilómetros por hora. En tal situación, los satélites giran con la Tierra, permaneciendo cada uno de ellos siempre sobre el mismo punto de ésta. El sistema equivale exactamente a tres torres telefónicas, de radio o de televisión, de 35.887 kilómetros de altura, pero representa un gran ahorro de madera y acero. También es posible usarlo como un "correo sin edificio": En la tierra, al escribir una carta, se llenan unos formularios estandarizados. Luego se analizan las palabras y se convierten en señales eléctricas, que se envían al satélite en lo alto. Al recibir el mensaje, éste lo transmite al próximo satélite; y éste envía a su vez las señales radiales a la tierra, donde se convierten de nuevo en palabras. Como se ve, el sistema equivale a un velocísimo mensajero sin piernas y que no recibe propinas.

4. Pilas solares. Los satélites pueden usarse también como fuentes de energía solar, que recogerían al girar en el espacio. Convertida aquélla en energía eléctrica, se transmitiría más tarde al centro de consumo. Esto es estrictamente para el futuro.

5. Faros para las naves espaciales. A no dudarlo, los satélites se utilizarán en el porvenir como centros de emisión de luces intermitentes y para transmitir mensajes radiales o señales, o sea como verdaderos faros para orientar las naves espaciales que se internen en el inmenso espacio vacío.

6. Los satélites como ayuda para la navegación en la Tierra. Si en cualquier momento se conoce la posición de un satélite sobre la superficie de la Tierra, aquél podrá servir como una estrella para orientarse, a pesar de que se mueva constantemente.

7. Faros de salvamento. Los satélites pueden recibir mensajes transmitidos por barcos, aviones o grupos de personas perdidas en la Tierra.

8. Estaciones en el espacio. Los satélites se moverán en varias órbitas. Así por ejemplo, habrá unos veinte satélites describiendo órbitas elípticas en torno a la Tierra, a distancias convenientes, y las naves espaciales harán escalas en ellos, cuando viajen hacia sus lugres de destino.

9. Satélites alrededor de la Luna. Los satélites que giren en torno de la Luna mantendrán una vigilancia constante y retransmitirán mensajes alrededor de aquélla al igual que lo hacen los que se mueven alrededor de la Tierra. Los exploradores de la Luna sabrán así lo que sus amigos hacen al otro lado de ella, lo que será una gran ventaja.

10. Satélites alrededor de los planetas. Una serie de satélites girarán, sin duda, alrededor de Marte, Venus y algunos otros planetas, en la misma forma que lo hacen ahora en torno a la Tierra.