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| Por Ignacio A. Ortiz-Bello |
| U.S.A. '97 |
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Diógenes, a quien también se le apoda "El Cínico",
amigo y admirador de Sócrates, el gran filósofo griego; pese
a su gran sabiduría y respeto por los pobladores de Atenas incluyendo
a Alejandro Magno. más se le recuerda por aquellos de que a plena
luz del día andaba con una lámpara encendida y pregonando
"Busco aun hombre" como explicación a su desprecio por
la humanidad y bienes materiales. y aquí vamos a tener que salir
con la lámpara de Diógenes... en busca de filatelistas puros,
de gente que ame a la filatelia por el mero placer de coleccionar sellos,
de pasar horas despegando sellos de los sobres, de ir clasificando los sellos
por países o temas, de confeccionar su propio álbum. de buscar
el significado de la imagen impresa en un sello. en fin. de disfrutar sanamente
su colección.
Un par de años atrás o quizá menos. en una ciudad como
ésta en la que vivo y creo que en todos los Estados Unidos. sólo
habían unas pocas oficinas filatélicas en oficinas de correos
muy seleccionadas, muchas de las cuales quedaban bien lejos del centro de
la ciudad, Pero ahora no, están proliferando unas oficinas bellamente
montadas para "servicios postales y de filatelia" donde están
muy bien presentados los sellos y otros productos filatélicos que
uno mismo puede tomar "Self Service" y luego llevar a la caja
para ser pagados. En estas nuevas tiendas se venden sellos, pero también
se venden camisetas. vasos. platos. afiches. libros y quien sabe qué
otra cosa se les ocurrirá para exprimirnos el bolsi1lo a los filatelistas.
Para contarles algo. Un amigo mío compró un libro en una de
estas oficinas que es una belleza. una obra muy documentada sobre un sello
emitido por el Servicio Postal de los Estados Unidos, un libro que para
los estudiosos del tema es de un gran valor. y que costó a mi amigo
mucho más de lo que pagaría en una librería por otro
que trate del mismo tema; pero para un filatelista no tiene valor alguno,
sólo el de los sellos que impecablemente montados aparecen en varias
de sus hojas. libro por el cual cualquier comerciante filatélico
serio le pagaría unos pocos dólares.
Es verdad que la filatelia está creciendo lentamente en los Estados
Unidos y podemos confiar en los cuadros analíticos que mensualmente
publica el semanario LINN'S los cuales así lo muestran; es verdad
que las últimas exposiciones y bolsas filatélicas efectuadas
en el Pacífico, Asia, Europa hasta la más reciente en San
Francisco han sido de un éxito total; es verdad que en las últimas
subastas se han roto récords de venta. se han roto récords
de precio por varios sellos. se han visto las subastas llenas de compradores;
Todo lo anterior es verdad. Pero también es cierto que se ha insistido
en el comercialismo. en "meter casi 200.000 personas" en San Francisco
'97 para ver cómo se les podían sacar los pesos y muy poco
para promocionar el hobby de la filatelia. para atraer nuevos filatelistas.
incluyendo a aquellos que no tienen mucho dinero para gastar.
Bueno, tenemos que ser pragmáticos, realistas, no cerrar los ojos
ante la realidad y admitir que la filatelia hoy día es más
que nunca un gran negocio y, como son menos los que coleccionan por el simple
hecho de coleccionar y más los que coleccionan o están envueltos
en la filatelia como inversión o medio de lucrar, cada día
y muy especialmente por estos lares veremos más gente meterse a filatelistas
y al Servicio Postal de los Estados Unidos inventando qué nuevo producto
poner a la venta en estas nuevas y flamantes tiendas que proliferan por
doquier.
¿Cabría aquí aquel viejo refrán que reza:
"el vivo vive del bobo, y el bobo de su trabajo? |
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Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 50 -
Octubre 1997 - Número 10
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