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Estás leyendo parte de la revista de Febrero de 1994
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Estados Unidos |
por Ignacio A. Ortiz-Bello
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| 40 años de periodismo filatélico |
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Coleccionar sellos de los Estados Unidos no ha sido muy popular en nuestros
países. La música, las modas, los estilos de vida norteamericanos
son copiados e imitados en todo el mundo y muy en particular por nosotros
que nos encontramos en el mismo continente, que tenemos tanta influencia
y contacto con los norteamericanos. Pero aun así, el coleccionar
sellos de los Estados Unidos ha sido el privilegio de unos pocos, pues no
se han visto grandes y buenas colecciones de sellos norteamericanos en manos
o posesión de nuestros filatelistas.
Yo no creo a los que manifiestan que ello se debe aun rechazo hacia el poderoso
vecino. De ser así lo mismo hubiera sucedido con la música,
la moda y otras influencias que hemos adoptado como si fueran propias, muchas
de las cuales han sido creadas por nosotros en los Estados Unidos y regresado
a nuestros países como foráneas. Yo opino (y ahora estoy viendo
manifestaciones que me avalúan) que el principal motivo por el cual
no se coleccionaban los sellos de los Estados Unidos en nuestros países
era un motivo económico. Coleccionar sellos de los Estados Unidos
representaba una inversión bastante alta en comparación con
el nivel económico de nuestros países: el álbum era
caro, los sellos eran caros, los materiales filatélicos eran caros.
Repito que se está notando un cambio en todo esto al haber mejores
comunicaciones entre el mercado filatélico de los Estados Unidos
(Miami y ciudades fronterizas con México Juegan un importante papel)
y los comerciantes y coleccionistas que nos visitan a menudo, quienes están
ávidos por encontrar algo para sus colecciones y que, al tener la
oportunidad de ver lo barato y fácil que se hace el coleccionar sellos
de los Estados Unidos, han decidido comenzar a coleccionar sellos, o por
lo menos están agregando algunos sellos norteamericanos a sus colecciones,
que antes se encontraban incompletas por la falta de los mismos.
y la guerra por el mercado filatélico norteamericano se desató
con gran furia y entusiasmo. Los dos grandes de la filatelia norteamericana
han estado batallando con ahínco por obtener más ventas. La
casa filatélica Harris, reconocida en todo el mundo por sus álbumes,
catálogos y ofertas de sellos por correo rebajó drásticamente
sus productos desplegando grandes anuncios en la prensa filatélica
desde su nueva dirección y gerencia, a la cual respondió inmediatamente
la casa Scott, otra muy reconocida empresa filatélica que publica
catálogos, álbumes, revistas y fabrica materiales filatélicos,
rebajando también gran parte de sus productos, al extremo de haberse
agotado algunas existencias que más tarde fueron reemplazadas.
Sumado a todo esto, y para abaratar aún más el coleccionismo
de sellos norteamericanos, han aparecido varias casas con ofertas de sellos
al valor facial con énfasis en las emisiones que aparecieron entre
los años 1940 al 1970, comprendiendo sellos de 3, 4, 5 y 6 centavos.
Información gratuita de las nuevas emisiones postales de los Estados
Unidos puede ser solicitada a: Philatelic Fulfillment Service Center, United
States Postal Service, P.O. Box 449997, Kansas City, Missouri 64144-9997,
Estados Unidos. El número de FAX es (816) 453-7264. |
Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 47 -
Febrero 1994 - Número 2
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