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Estás leyendo parte de la revista de Abril de 1991
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AUTOS VOLADORES |
| por Bob McCaHery |
| En 1999, podrá salir rumbo
al trabajo más tarde de lo que lo había estado haciendo, porque
podrá hacer el viaje en su propio volantón Moller 400. |
| Introduce su código de seguridad en el
teclado externo del vehículo. El techo transparente de la cabina
se alza silenciosamente, mientras la computadora a bordo inicia su secuencia
de revisiones preliminares al vuelo. Al sentarse en su asiento, el piloto
se asegura su arnés de seguridad de inercia y explora el monitor
de los sistemas (una de dos pantallas CRT que reemplaza a las docenas de
cuadrantes usados en la aviación tradicional). Se recibe la señal
de que todos los sistemas están activos y listos, y entonces la computadora
obedece las órdenes verbales, para revisar cada paso: Nivel de combustible
y presión. Confirmados. Computadora de estabilidad. Confirmada. Batería.
Confirmada. Ignición. Confirmada. |
| Ilustración: Mark McCandlish |
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grande y claro |
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| Fuente: Revista Mecánica Popular - Volumen 44 - Abril
1991 - Número 4 |
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